Ciudadanos se quejan por la falta de operativos de seguridad
Cuautla.- Un hombre fue atacado a balazos en el interior de un bar que se ubica en el bulevar José María Morelos y Pavón, en la colonia Guadalupe Victoria de este municipio, por dos personas que llegaron a bordo de una motocicleta e irrumpieron para asaltar a clientes y trabajadores.
Sin embargo, uno de los afectados se resistió, por lo que le dispararon y perdió la vida.
Después, fue identificado como Javier Ramírez Vidal, integrante de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) de la alcaldía Álvaro Obregón de la ciudad de México.
Los hechos ocurrieron el pasado domingo, alrededor de las 2:00 de la madrugada, cuando numerosas personas –entre las que había turistas– se encontraban conviviendo en el bar.
La falta de patrullajes y de operativos para inhibir a la delincuencia permitió que un hombre y una mujer con peluca actuaran con toda impunidad, pues se dieron tiempo de asaltar a los parroquianos y después de privar de la vida al empresario se dieron a la fuga con toda calma, aprovechando la ausencia de policías.
El asesinato de Javier Ramírez Vidal (quien era secretario de la Canaco en Álvaro Obregón y vicepresidente de la Concanaco) causó consternación e indignación en la cúpula de la Concanaco, que abordará el tema en su próxima reunión nacional para pronunciarse sobre la inseguridad, que está fuera de control en la Heroica.
El dirigente de la Canaco Cuautla, Juan Díaz Olvera, reiteró el llamado a las autoridades municipales, estatales y federales para implementar una política de seguridad que garantice la protección de los ciudadanos, ante la ola de violencia que se registra desde el inicio de esta administración municipal.
Criticó que a pesar de que se han anunciado supuestos megaoperativos con la participación del Ejército mexicano y de la Guardia Nacional, así como con la Policía Morelos, en la práctica no existen operativos para enfrentar a la delincuencia, la cual ya no se limita a enfrentar a sus enemigos, sino que sus acciones están alcanzando a los ciudadanos que sólo ejercen su derecho a divertirse.
Lamentó que no exista interés en poner a funcionar las cámaras de videovigilancia, las cuales parecen estar fuera de servicio, pues a la fecha no han servido para reforzar la seguridad ni mucho menos para identificar y dar seguimiento a los delincuentes en su huida.
El homicidio del empresario vuelve a colocar a Cuautla en el escenario nacional como una de las ciudades más inseguras del país, lo que inhibe las inversiones y sigue provocando el desplome en las ventas del comercio establecido, por el temor de los ciudadanos de salir con libertad y tranquilidad a las calles.