En este sentido, Güemes Ríos giró instrucciones al encargado de la Secretaría de Seguridad Pública municipal, Alfredo Marín Cabrera, y al encargado de la Dirección de Tránsito, Rodolfo Ibarra Navarrete, para que descarten el proyecto de cambio de colores, el cual ya se había dado a conocer a la población con anterioridad.
Cabe destacar que las autoridades refirieron que este cambio no se puede llevar a cabo como se tenía pensado (blanco para estacionarse y amarillo para impedir que los automóviles aparquen), debido a que se analizó detenidamente el Reglamento de Tránsito, en el cual no se encuentra establecido que el color blanco fuera para permitir estacionarse y el amarillo para prohibirlo, por lo que destacaron que primeramente tendría que haber un cambio en este reglamento.
Por otra parte, expresaron que la ciudadanía ya se encuentra acostumbrada a los colores que actualmente se usan (amarillo y rojo) y sabe perfectamente cómo funcionan: la línea amarilla es para estacionarse y la roja significa una prohibición.
Finalmente, la presente administración informa que no habrá cambio alguno, por lo que exhorta a los conductores a respetar esta norma y evitar estacionarse en línea roja, ya que se podrán hacer acreedores de una multa.