Aseguró que los productores de caña no son los que pierden sino el ingenio, porque al cargarla se vuelve a pesar y se les paga a los cañeros; “el que sí pierde es el ingenio, ya que tiene que cumplir con el contrato laboral que tiene con los obreros; son 300 obreros aproximadamente con los que cuenta el ingenio, por los 5 días son mil 500 jornales los que el ingenio tiene que pagar”.
En donde sí hay pérdidas para los cañeros es en la concentración de azúcar, indicó el también diputado federal por el V distrito, “hay merma en la sacarosa porque se humedece la tierra, la caña vuelve a jalar agua del suelo y la concentración de azúcar se pierde; ahí sí nos afecta aunque esperamos que no afecte tanto. Empezaremos a cortar las tierras más secas”, expuso.
La meta para esta zafra es moler 430 mil toneladas que hay en campo, vamos hasta ahora 180 mil toneladas, casi llegamos al 50 por ciento, y de karbe, 131 kilos con 650 gramos. “Estamos con la idea de llegar a eso mínimo; será difícil porque por lluvias, porque se inició la zafra más temprano, entre otros factores”, señaló.