El pasado lunes, a las 12 horas, el cuerpo colegiado se reunió en la Sala Dos de juicios orales para dar lectura a la sentencia, en la que los tres jueces determinaron condenar a 25 años de prisión a cada uno de los imputados y una multa de mil días de salario mínimo.
A petición del representante de la Fiscalía Contra el Secuestro y los defensores de los ahora sentenciados, la juez relatora sólo dio lectura a los puntos resolutivos de la sentencia contenida en el expediente JO/020/2013, es decir, no se dio a conocer cómo y cuándo se cometió el plagio del niño de seis años, de nombre Cristian “N”.
Los datos que dieron a conocer miembros de la Fiscalía es que el pasado 20 de julio de 2013, el infante viajaba con sus padres a bordo de un automóvil Mazda color rojo, con placas PXS-9355 de Morelos, por la carretera Tepetzingo-Aeropuerto, a la altura del poblado de Tetecalita, en Emiliano Zapata, cuando unos individuos que viajaban en una camioneta, obligaron al padre a detener la marcha del automotor y, acto seguido, los hombres se llevaron consigo al menor.
Los plagiarios fueron atrapados después de que cobraron el rescate e incluso uno de ellos fue detenido en Iguala, Guerrero, donde se escondía, pues sus cómplices ya habían sido detenidos por la entonces Policía Ministerial.
Los imputados, Abraham Acosta Escalante, Ricardo Ortega Reynoso y Víctor Manuel Ocampo Amezcua, escucharon a la juez, que le dio lectura a la sentencia, pues minutos antes de que iniciara la audiencia, sus abogados les hablaron de la posibilidad de que pudieran obtener su libertad.
De acuerdo con el resolutivo del Tribunal de Juicios Orales, la sentencia en contra de los tres hombres no es con una penalidad alta, pues el secuestro tiene en Morelos una sanción de 70 años de cárcel, pero los jueces tomaron en cuenta que los sentenciados no tienen antecedentes, ni ninguna otra causa penal en su contra.
La defensa de los imputados antes de que éstos fueran esposados para ser conducidos al penal de Atlacholoaya, les informó que pueden recurrir al recurso de casación, con el propósito de revertir la sentencia o bien, de disminuir los años de cárcel, ya que el Tribunal les informó que cuentan con 15 días hábiles para inconformarse.