El presidente Andrés Manuel López Obrador, reaccionó ante las declaraciones del Gobierno de Texas sobre la situación migratoria, calificándolos de “malos gobernantes y malos cristianos”.
Esto surge tras la muerte de dos migrantes en el río Bravo, donde Texas instaló un cerco de boyas y alambre de púas. El mandatario afirmó que Greg Abbott no sabe o no le importa la migración.
“No se puede debatir con quiénes no tienen conocimiento de la condición humana, no saben del porqué de la migración o aunque lo sepan, no les importa”, declaró el presidente de México.
“Ellos actúan de manera inhumana y en forma inmoral”, agregó.
El mandatario mexicano aseguró que quienes implementan las políticas antiinmigrantes son “malos cristianos”.
López Obrador expresó que en sus iglesias los pastores evangélicos y sacerdotes católicos cuestionarán a los gobernantes texanos, ya que además de actuar como malos gobernantes y ciudadanos, también están actuando de manera inapropiada desde una perspectiva cristiana.
Estas declaraciones del presidente mexicano responden a las acusaciones de un portavoz del gobernador de Texas, Greg Abbott, quien acusó a López Obrador de tener una "política de puertas abiertas" hacia los migrantes.
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La situación ha generado indignación en ambos lados de la frontera desde que se reportó el hallazgo de los dos cadáveres en Piedras Negras, ciudad fronteriza con Eagle Pass, Texas.
El Gobierno de México ha elevado sus reclamos a Estados Unidos, acusando a Texas de violar tratados bilaterales de aguas y derechos humanos con las obstrucciones colocadas en el río Bravo para detener a los migrantes. La Secretaría de Relaciones Exteriores ha enviado dos quejas diplomáticas a Washington al respecto.
Mientras tanto, la investigación sobre la muerte de los migrantes continúa, y se espera que se aclare la identidad del segundo fallecido. López Obrador calificó de inhumano y desinformado el actuar de aquellos que no comprenden la condición humana y la realidad de la migración o, incluso sabiéndolo, no les importa. La situación sigue siendo motivo de preocupación en ambos países y se espera que se encuentren soluciones para abordar esta problemática.