Cuernavaca, Morelos.- El titular de la Secretaría de la Contraloría General de gobierno, José Enrique Félix Iñesta, hizo un llamado a los cerca de cinco mil servidores públicos obligados por ley, a presentar su manifestación de bienes patrimoniales, de interés y fiscales ante esa dependencia, a fin de evitar multas y sanciones.
Durante una breve conferencia de prensa, el funcionario indicó que en ésta deberán estar reflejados toda clase de movimientos en lo que corresponde a bienes, ya sea adquisiciones o ventas, registradas durante el 2016, a fin de que puedan ser revisadas y analizadas por las instancias competentes.
Dijo que a diferencia de años pasados, hoy cumplir con ese trámite es muy sencillo, porque se puede desarrollar en línea y en unos cuantos minutos, de tal manera que no hay excusa ni pretexto, de otra manera, se procederá a la aplicación de sanciones.
Félix Iñesta recordó que en la presentación de la manifestación de bienes del 2015, 229 servidores públicos fueron multados por una suma superior a los 184 mil pesos, por no haber cumplido en tiempo y forma con ese requisito; hoy, y a partir de la ley anticorrupción, hay un endurecimiento en las penas para quienes desestimen el llamado.
Pero hay aquellos cuya declaración deberá cumplir con tres aspectos: patrimonial, de interés y fiscal, y son entre otros, el gobernador del estado, los secretarios de despacho, subsecretarios, directores generales, supervisores, inspectores y agentes del Ministerio Público.
Luego agregó que: “y si bien es cierto que todavía se cuenta con un plazo pertinente para aplicar la nueva ley anticorrupción, debido a que primero hay que armonizar las normas estatales con la Federación, más vale que en lo que a nosotros corresponde nos ajustemos ya a las nuevas reglas, que son mucho más estrictas”.
En lo referente a la armonización de la ley local con la federal, destacó que se prepara el personal que se hará cargo de subir la información que se deberá enviar cotidianamente y que requiere de una capacitación muy completa, porque hay aspectos bastante complejos, en los que cualquier error puede llevar a penas inevitables.