Destacó que no se trata sólo de los derrumbes y deslaves en tramos como la carretera "La Espada", entre Hueyapan y Tetela del Volcán, hay daño mayor en otras regiones que tendrá que ser objeto de inversiones considerables.
Se refirió al trayecto Cuernavaca-Cuautla a la altura de Progreso hasta La Joya, destacó que se construirán varios pasos a desnivel, para hacer algunas remediaciones mayores, pero en este caso lo mejor es realizar un trabajo profundo.
Tomando en consideración que son más de dos mil kilómetros de vialidades estatales, los trayectos que requieren remedición representan cerca de 400 kilómetros y esto es en distintos puntos de la entidad.
La carretera Yautepec-Tepoztlán es una de las más dañadas. Ahí, ya se comenzó a laborar, pero a medida que se mantiene el elevado nivel de tormentas, los efectos continúan ampliándose, consideró el funcionario.
No obstante recordó que la dependencia a su cargo cuenta con brigadas de mantenimiento con equipo y maquinaria. “Los casos menores se resolverán con bacheo, pero muchos kilómetros reclaman trato especial para poder darles mayor vida”.
“Lo malo es que frente a algunas contingencias, se ha tenido que echar mano de parte del presupuesto ya programado y la disponibilidad de fondos se reduce”, reconoció el funcionario.