El líder de los litigantes penalistas, Cipriano Sotelo Salgado, expresó que en el Código más del 80 por ciento de los delitos fueron clasificados como graves y con obligada prisión preventiva para los imputados.
Expresó que en la reforma constitucional federal en materia penal se clasificaron como graves sólo tres delitos: violación, homicidio y secuestro.
Bajo esta premisa, dijo, no sólo es absurdo y violatorio de la Constitución federal, sino contraproducente que la legislación penal en el estado de Morelos clasifique la mayoría de los delitos como grave; pues esto, entre otras cosas, ha provocado que aumente la sobrepoblación en los centros penitenciarios ante la imposibilidad de muchos de los imputados de enfrentar sus procesos en libertad.
Además de secuestro, violación y homicidio, la legislación penal contempla como graves 19 delitos más como abigeato, rebelión, delitos cometidos por fraccionadores, robo, inseminación artificial sin consentimiento, hostigamiento y abuso sexual. Estos delitos cometidos en grado de tentativa, también son considerados graves.
Indicó que el hecho de que la mayor parte de los delitos esté clasificada como grave atenta contra el principio de presunción de inocencia, pues existen conductas ilícitas que no ameritan tal clasificación, y los imputados podrían enfrentar su proceso en libertad.
Sotelo Salgado dijo que este tipo de inconsistencias ha provocado que el sistema de justicia oral no funcione, “se desnaturalice” y no cumpla con sus objetivos principales, como el de despresurizar los centros penitenciarios.
Incluso, criticó que para desfogar la sobrepoblación que existe en los penales estatales se pretenda construir en Morelos un centro de reclusión federal para reubicar ahí a los delincuentes procesados y sentenciados por delitos federales.