El secretario general del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Poder Ejecutivo, Daniel Hernán López, recordó que prácticamente queda sólo el resto de esta semana a fin de que quienes se interesen en buscar ese liderazgo a partir de febrero del 2018 se inscriban, porque la convocatoria se cierra el próximo lunes.
Al respecto, mencionó que hasta ayer sólo habían cumplido con los requisitos correspondientes, cuatro planillas, “que por ahora no mencionaremos, para que no se piense que es publicidad”, debido a que también los efectos del sismo del pasado 19 de septiembre han tenido repercusiones en ese terreno.
Explicó que entre los requisitos para poder lograr la inscripción, “los interesados deberán tener perfectamente integrada la planilla; es decir, no puede faltar algún miembro de las carteras, porque es objeto de rechazo y eso ya ocurrió la semana anterior”. Pero además, abundó, se pide la carta de no antecedentes penales; la hoja de servicios y otros documentos expedidos por la Dirección General de Personal que desafortunadamente estuvo cerrada algunos días por algunos daños provocados por el terremoto y apenas está entregando esos trámites.
Hernán López, quien ha tenido que convertir en sede sindical un espacio alterno debido a que una corriente interna encabezada por Argelia Corona sigue en posesión del edificio y sin permitirle el acceso, sostuvo que a pesar de la crítica de sus detractores, que intentan descalificar el proceso, él sigue siendo el líder gremial, porque institucionalmente, a través de la Secretaría de Administración, así se reconoce.
“Ellos jamás lograron obtener la toma de nota, que es el reconocimiento oficial al titular del sindicato; la seguimos conservando y por eso somos los responsables, estatutariamente, de darle formalidad a la elección, sin embargo, estamos cumpliendo cabalmente con las normas al respecto”, indicó.
“Bueno –abundó- todo lo relacionado con apoyos y pago de prestaciones que el gobierno tiene que entregar al sindicato se hace a través de nuestro comité”, recordó. Reconoció que, al frente de esa organización que cuenta con más de dos mil 200 sindicalizados, vivió momentos difíciles, porque se le acusaba de desvío de fondos, sin embargo, nunca lograron demostrar nada y consideró que a éstas alturas lo único que espera es entregar la estafeta a quién gane la elección, que ya comienza en una fase definitiva a partir de la semana entrante, cuando las planillas entren en campaña electoral.