En tanto, la demanda promovida por un grupo de estudiantes universitarios contra el alza de la tarifa en el 2009 fue archivada ante las limitaciones del Tribunal Contencioso Administrativo para emplazar a juicio a casi 10 mil transportistas.

El presidente de esta agrupación, Juan Juárez Rivas, expresó que los concesionarios del transporte público no han mejorado ni el servicio ni renovado las unidades, como se comprometieron en aquel año a cambio de que el Poder Ejecutivo autorizara el aumento de la tarifa.

Señaló que nuevamente se intenta dar un golpe a la clase trabajadora pues si bien los concesionarios argumentan alzas en el preciso de gasolina y otros insumos, los trabajadores siguen con el mismo salario.

Criticó que el transportista Enrique Ramos Zepeda, sin representar a todo el gremio, sea quien encabece la exigencia al gobierno del estado para subir la tarifa en un grado desproporcionado en comparación con el bajo salario que percibe el grueso de la población.

No obstante, señaló que es responsabilidad del Poder Ejecutivo implementar las medidas necesarias para frenar una posible alza al costo del transporte público, sobre todo en un contexto económico adverso.

Sostuvo que si es preciso, el gobierno estatal deberá ofrecer subsidios adicionales al sector transportista; de lo contrario, autorizar un incremento a la tarifa implicaría generar un grave conflicto social.

Asimismo, Juárez Rivas –quien fungió como asesor de estudiantes de la UAEM-- detalló que los juicios de nulidad promovidos en el 2009 por universitarios contra el aumento de la tarifa del transporte fueron archivados por el Tribunal Contencioso Administrativo ante la incapacidad material de esta instancia para notificar y emplazar a juicio a más de 10 mil transportistas.

Cabe destacar que incluso se planteó la posibilidad de emplazar a los permisionarios vía edictos; sin embargo, su publicación tanto en el boletín judicial como en diarios de circulación local era incosteable para los estudiantes demandantes, quienes a pesar de haber recibido la promesa de apoyo de algunos diputados, nunca recibieron la ayuda.