Durante una sesión de análisis a la que fueron invitados los representantes de instituciones relacionadas con la vivienda, diputados, alcaldes y senadores, el funcionario advirtió que la autorización de construcciones masivas de vivienda viene causando graves problemas en todos los órdenes, principalmente en lo que tiene que ver con el entorno ecológico, la prestación de servicios y la disposición de recursos naturales.
En el encuentro denominado "Reunión de análisis de vivienda y de ordenamiento territorial” se quejó de que la mayoría de los municipios no estén apegándose a las disposiciones existentes en la materia y propiciando un crecimiento poblacional anárquico, desordenado y sin una mínima planeación.
Dijo que Cuernavaca y Cuautla son un ejemplo claro de este desbordamiento urbano. En el caso de la capital estatal, en 20 años pasamos de 386 mil habitantes, a cerca de un millón y en la heroica de 238 mil a unos 450 mil con la absorción de enormes áreas de territorio que en su oportunidad fueron parcelas productivas.
Lo lamentable, agregó el delegado, es que todo esto viene acompañado de insuficiente equipamiento de las ciudades que comienzan a padecer falta de drenajes y sistemas de desagüe hidráulico, vialidades limitadas que ocasionan congestionamiento y contribuyen a la pérdida de horas hombre en las jornadas laborales.