Luego de dos mesas de análisis con diputados locales, transportistas refirieron que los avances no son considerables y advirtieron cierta resistencia por parte de los legisladores, en específico del priista Julio Espín Navarrete, quien fue el impulsor de la reforma al Artículo 238 del Código Penal para el Estado de Morelos, que establece sanciones severas para los conductores que por conducir de manera "temeraria", provoquen un accidente
Aurelio Carmona Sandoval, dirigente de Rutas Unidas del Transporte Colectivo, dijo que darán hasta esta semana para que el Congreso del estado defina si se aprueba o no la "contrarreforma" que ya fue redactada por la misma Comisión de Tránsito, Transportes y Vías de Comunicación, a fin de disminuir las sanciones para los choferes imprudentes.
De no ver resultados favorables para el transporte público esta semana, Carmona Sandoval aseguró que cumplirán con su amenaza de realizar manifestaciones en Cuernavaca, a fin de presionar a los diputados y autoridades del gobierno estatal, por considerar que es injusto que se trate como criminales a los operadores.
El líder transportista aseguró que han buscado una solución pacífica, sin embargo, refirió que los legisladores no han mostrado la disposición que se esperaba para echar abajo las modificaciones al Código Penal para el Estado de Morelos, que entraron en vigencia el primero de septiembre, pesar que se ha informado de la gravedad de "criminalizar" a los conductores que, de por sí, ya son "perseguidos" por las policías municipales, aseguró.
De igual forma, Carmona Sandoval recordó que interpusieron un amparo ante un tribunal federal, a fin de que determine o no la constitucionalidad de la reforma, sobre todo porque se considera que resulta violatoria a los derechos fundamentales de los conductores.