En el caso del CCE, Juan Carlos Salgado Ponce, presidente de la cúpula empresarial, se manifestó “totalmente a favor de la reforma”, e incluso, afirmó que ya “hemos estado tratando de impulsarla con los legisladores federales”, y algunas de las ventajas para los empresarios, dijo “es que vienen contemplados los contratos a prueba, que no existan salarios caídos mayores a 12 meses, aunque nuestra propuesta era de seis meses”, y otras más que ya no pudo enumerar, al reiterar que es una necesidad desde hace tiempo el que quede aprobada esta reforma.

Otros líderes de cámaras han señalado que desconocen en su totalidad las implicaciones y las diferencias entre las iniciativas que se han presentado, primero desde el Partido Acción Nacional (PAN) luego una contrapropuesta del PRI y ahora la del presidente de la República, por lo que señalaron importante realizar foros y que se socialice para “saber bien en qué nos va a beneficiar al empresariado, pero sin que esto afecte a los trabajadores, sino que busquemos el punto de equilibrio”, destacó Erick Castro, integrante de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

Propuesta del PRI

Por su parte, la diputada federal del PRI que representa a Morelos, Marisela Velázquez Sánchez, dio a conocer la postura de sus compañeros/as en el Congreso de la Unión en relación a la reforma laboral que envió el actual presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, asegurando que la que propone su partido “es un nuevo esquema de reforma laboral que va más allá de la iniciativa del presidente (Felipe) Calderón”.

En este sentido, detalló que lo que buscan los del tricolor, es construir un acuerdo plural, incluyente y global que respete y amplíe los derechos laborales, pero que además les brinde mecanismos de competitividad y productividad, por ello dijo, “es necesaria una reforma laboral que genere empleo y brinde la competitividad que se requiere para facilitar el empleo de calidad, sin vulnerar los derechos de los trabajadores”.