“Él puede alegar que no hay sanción administrativa, ni penal, pero sí es una inmoralidad y con esto demuestra que el PRI es dominado por pequeños grupos que tienen el control total”, afirmó el también representante de los comerciantes del tianguis de Temixco.

“Me da vergüenza decir que pertenecí a este partido por 10 años, y también me da vergüenza cómo unos cuantos lo toman como si fuera un botín de guerra”, advirtió el litigante.

El abogado se refirió a la nota periodística que apareció ayer a ocho columnas en este periódico, en el que el presidente provisional se deslinda de la designación de su hijo. “Eso es no tener vergüenza, porque él firmó el oficio, ahora que no diga que nada tiene que ver, y que también diga que en dado caso, él, al ser el titular, perjudica el desarrollo de su hijo en el partido”, afirmó el abogado.

Juárez Rivas comentó que por este tipo de irregularidades, la gente no le ha respondido al PRI en las urnas, pues la propia militancia está cansada de que los cargos recaigan siempre en los mismos o sus familiares, como si se tratara de una empresa y no de un ente que subsiste gracias a los recursos públicos.

Finalmente, consideró que el tricolor está lejos de ser una verdadera oposición, porque sus dirigentes solo buscan su interés personal.