Andrea Acevedo García, quien había sido designada como la oradora en representación de la sociedad civil y en general de las mujeres que participaron en los foros, destacó que esta es la primera ocasión en la que se rechaza por parte de algunos diputados, la intervención en la sesión de la representación civil, pese a que ya estaba considerada en el orden del día.
Entrevistada a las puertas del palacio legislativo, junto con dirigentes de otras organizaciones, dijo que no obstante la legisladora del PRD y secretaria de la comisión de equidad y género Hortensia Figueroa, leyó el discurso que ella iba a pronunciar.
Mencionaron que a pesar de la ausencia de funcionarios del Ejecutivo, así como de algunos diputados, habrán de hacer llegar el pronunciamiento de las agrupaciones a todas las instituciones, para hacer valer su derecho de ser escuchadas.
Como parte de las conclusiones, expresadas en el discurso –en el que se hizo especial alusión a la participación de la mujer en la independencia y la revolución de México- destacaron la necesidad de que en el estado, se reconozca el derecho a la mujer a decidir y que se revise la reforma a la legislación que prohíbe el aborto en cualquier de sus causales, incluso la de violación.
Señalaron que a cien años de la revolución no existe equidad en derechos sociales como el de educación, donde hace falta más becas y programas dirigidos a la mujer; en salud, donde enfatizaron han aumentado de forma alarmante los casos de infecciones de transmisión sexual como la “feminización del VIH SIDA”, así como el cáncer cérvico uterino; señalaron que sigue pendiente el derecho de la mujer de obtener un empleo digno, sin que se sufra discriminación ni menor salario.
Exigieron que los beneficios de programas sociales se otorguen a quienes más los necesitan y no por compadrazgos o influyentismos; políticas y programas ambientales con perspectiva de género especialmente en lo que se refiere a la dotación de agua para uso doméstico y productivo; demandaron que se reconozca el trabajo doméstico. Evidenciaron que no obstante que la mujer es parte fundamental del electorado, hay muy pocas mujeres en puestos de representación y de ejercicio de gobierno. Especialmente juzgaron a los alcaldes, al no integrar en sus equipos de trabajo a las mujeres en puestos con capacidad de decisión.
De manera especial, en este diagnóstico y serie de exigencias, las agrupaciones de la sociedad civil hicieron el señalamiento contra las instancias que no han cumplido su trabajo, al sostener que la violencia contra las mujeres ha ido en incremento y se ha ampliado las formas de agresión, desde la institucional hasta los feminicidios de los cuales en lo que va del año ya se contabilizan al menos 10, y en el 2009 registran a 43 mujeres asesinadas, lo que ubica a Morelos en el segundo lugar nacional en este gravísimo problema.