Durante la toma de protesta de la Clase 1996, anticipados y remisos del Servicio Militar Nacional en las instalaciones del Tercer Regimiento Blindado en Cuernavaca, lamentó la pérdida de la vida de seis elementos castrenses al ser derribado el helicóptero en el que realizaban una misión de rastreo de un capo, y los disturbios ocasionados por el crimen organizado en Jalisco, Michoacán y Guanajuato.
Refrendó su solidaridad con las familias de los militares caídos y el compromiso de las fuerzas armadas por defender a la patria y sus ciudadanos.
“Los soldados de tierra, mar y aire de todo el país expresamos nuestro respeto, solidaridad, con las familias de los militares que fueron abatidos en el estado de Jalisco el día 1 de mayo. Nuestro reconocimiento perenne a ellos y nuestro apoyo incondicional a sus padres, esposas, e hijos, así como nuestro compromiso absoluto, inagotable, incansable, para continuar trabajando sin descanso en la salvaguarda de los buenos mexicanos, siempre respetando la ley y a las personas en coordinación estrecha con los tres niveles de gobierno”, dijo.
Recordó que por decreto en 1940 el Servicio Militar Mexicano fue instituido como obligatorio por el entonces presidente de la república, general Lázaro Cárdenas del Río, pero con el paso del tiempo ha tenido modificaciones y en la actualidad sirve para capacitar a los conscriptos en conocimientos sobre la disciplina castrense y desarrollar en ellos valores militares.
Al tomar protesta a los jóvenes del Servicio Militar Nacional, los llamó a servir a la patria con valor y honestidad, a ser buenos ciudadanos y un ejemplo de la juventud que se prepara y cumple con los compromisos adquiridos con la sociedad mexicana.
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