Desde temprana hora, padres de familia de escuelas ubicadas en las diferentes regiones del estado, se encontraron con letreros colocados en los portones de planteles con la leyenda: "Esta escuela apoya el paro nacional contra la reforma y la evaluación punitiva". Las actividades se suspendieron lo mismo en la Primaria Benito Juárez del Centro de Cuernavaca, que en la Felipe Carrillo Puerto de Cuautla, o en el Cebetis de Los Pilares de Jojutla, por mencionar algunos centros educativos donde hubo paro de labores.
Alejandro Trujillo González, vocero del Movimiento Magisterial de Bases (MMB), aseguró que cuando menos el 80% de las escuelas y más de 20 mil trabajadores participaron en el paro nacional en Morelos. Calificó como absurdas las declaraciones oficiales en el sentido de que sólo el 5% habrían suspendido labores. "De nuevo le demostramos al gobierno que no somos dos o tres y que los trabajadores estamos en contra de su evaluación punitiva, que resulta de la reforma laboral, que no educativa", señaló, al reiterar la postura contra la aplicación de las evaluaciones que por primera vez en la historia, se proyecta aplicar a docentes en activo para la permanencia.
Josefina Martínez Romero, vocera de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), dijo que el paro de labores es una muestra de rebeldía y protesta de los trabajadores, quienes se dieron a la tarea de informar a los padres de familia sobre las pretensiones "privatizadoras" de la reforma educativa.
De hecho, en ciertos planteles como en la primaria de la colonia Ciudad Chapultepec de Cuernavaca, se distribuyó a padres de familia folletos o volantes con la exposición de los argumentos de los trabajadores que están en contra de la reforma, con mayor énfasis en lo que consideran es un proceso de privatización.
En otras escuelas sí hubo labores, como en el caso de la "Juan Enrique Pestalozzi", donde se pudo constatar que por órdenes de las autoridades, incluso se pasó lista a los maestros y sólo hubo una ausencia justificada por incapacidad y ya estaba lista la maestra que sustituirá al docente.
Marchan y exigen recepción de pliego petitorio
De igual manera, como lo anunciaron, miles de maestros salieron una vez más a las calles a marchar para expresar su inconformidad con la reforma y en especial con la evaluación.
Desde poco después de las 10 horas inició el contingente su camino en la Glorieta de Emiliano Zapata en Buena Vista al norte de esta ciudad. Avanzó por la avenida Morelos, la calle de Obregón, Matamoros y Galeana, en el centro de la ciudad.
Ahí en el zócalo, la columna que se nutría conforme avanzaba, se dispersó y un grupo de esos maestros bloqueó las calles de Gutenberg y de Galeana, para reclamar que la comisión fuera recibida.
Los docentes se encontraron con grupos de granaderos que fueron apostados en la sede del Poder Ejecutivo desde temprana hora. Por momentos el clima fue tenso, hubo jaloneos, pues los profesores bloquearon los dos accesos del palacio y les impidieron entrar a entregar su pliego petitorio.
Josefina Martínez denunció que la actitud gubernamental es de absoluta cerrazón y la presencia de los granaderos fue interpretada por los inconformes como una amenaza.
Martínez Romero destacó que en la marcha -como se acordó en asamblea- los maestros enarbolaron varios puntos que estaban integrados en su pliego petitorio, entre ellos la abrogación de la reforma educativa; la exigencia de la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa; otro punto fue el demandar que se respete la tierra y el agua y por ello se detengan proyectos que atentan contra este derecho; y como cuarto punto manifestaron su defensa a las escuelas normales, formadoras de maestros que hoy en día "son atacadas por el gobierno que pretende irlas desapareciendo".
La representante de la CNTE aseveró que los maestros están conscientes de que se les aplicaría descuento por el paro de labores, pero dejó en claro que la autoridad por ley sólo puede proceder al descuento, no a otro tipo de amonestación o de sanciones.
De acuerdo con los voceros, en la marcha participaron más de diez mil maestros; según el reporte de elementos de tránsito, estuvieron en el recorrido alrededor de cinco mil manifestantes.
Luego de más de cuatro horas de manifestarse a las puertas del palacio, los maestros que habían bloqueado los accesos decidieron retirarse, al sostener que no había condiciones para entregar el pliego petitorio y entablar el diálogo, y responsabilizaron al Ejecutivo de cualquier agresión.