El titular del organismo Hugo Antonio Ocampo Cué informó que ya se han considerado medidas para evitar la falsificación de recetas médicas, así como para detectar si hay algún medicamento que es comercializado de forma inusual, lo que podría derivar en una investigación sobre posibles irregularidades.
El funcionario estatal recordó que esta disposición ya está contenida en la legislación desde hace varios años, que desde hace meses se tomó el acuerdo en el Consejo Nacional de Salud de hacer respetar la norma y que hoy entra en vigor, luego de un lapso que se pactó con los comerciantes del ramo y para establecer los lineamientos correspondientes.
Destacó que México era de los pocos países que no cumplía con esta medida, que implica un beneficio para toda la población, pues se observó que el uso inadecuado de los antibióticos genera en un determinado plazo resistencia de las enfermedades y que los tratamientos sean más complicados.
Cabe recordar que la Secretaría de Salud dio a conocer en su momento cuáles son las sustancias que no deben ser comercializadas o expendidas sin recetas médicas, que son antibióticos. De igual forma se informó cuáles son los lineamientos, entre ellos el que los propietarios de farmacias, deberán pedir la receta médica al comprador y vender únicamente la cantidad de medicamento que está prescrita para completar el tratamiento. Una vez vendidas las dosis completas se deberá hacer la anotación correspondiente en la receta o en su caso sellarla.
Además deberán llevar el registro de la cédula y médico que emite las recetas, así como los antibióticos que se venden y las fechas de expedición, pues de manera periódica la autoridad realizará arqueos o revisiones de estos registros.
Si se encuentra que hay venta fuera de la norma se habrá de establecer sanciones, de acuerdo con la gravedad de la falta, y dichas sanciones van desde la amonestación, la multa económica, que va de 5 a 10 mil días de salario mínimo, al cierre temporal y hasta la clausura definitiva del establecimiento.
Destacó que este es un gremio de gran responsabilidad y colaboración con los comerciantes de este gremio, que saben de la importancia de esta disposición para la salud pública.
Ocampo Cué hizo un llamado a al población a ser comprensiva, a que acuda a su médico a consulta, que no insista en que le vendan los antibióticos sin cumplir con la referida norma y que colaboren a fomentar esta cultura de uso responsable de dichas sustancias.
En otro orden de ideas, el titular de la Coprisem informó que se mantendrá la vigilancia con la presencia diaria de los verificadores en el mercado Adolfo López Mateos, para evitar riesgos de contagio de enfermedades como las gastrointestinales.
Mencionó que hubo dos locatarios que comercializaban lácteos, que habían mostrado resistencia a que se aseguraran 130 kilogramos de productos entre quesos, crema y yogourt, que los verificadores consideraron no aptos para su venta y comercialización pues habían pasado mucho tiempo sin refrigeración, debido a la falta de energía eléctrica.
Dijo que finalmente se dio la colaboración y se inmovilizó ese producto con cinta y plástico, que seguramente las empresas de las marcas correspondientes habrán de canjear.
Ocampo Cué comentó que la carne de res, cerdo y aves que fue eliminada, se sacó del mercado porque desafortunadamente notaron que ya había “corroñeo” por parte de algunas personas de la carne quemada, que con el pretexto de que la darían a sus perros pretendían llevársela, con riesgo para la salud en caso de consumo en humanos.
Además informó que se autorizó a comerciantes de pollo y de algunos otros alimentos a que ante la desesperación y las graves pérdidas económicas, que se vendieran algunos productos como pollo, siempre y cuando se siguieran las recomendaciones mínimas de higiene como el uso de rejillas de plástico, camas de hielo, entre otras.
El funcionario dijo que existe toda la disposición de colaborar con los comerciantes, pero subrayó que es fundamental proteger la salud de la población. De ahí que enfatizó que seguirán con la vigilancia de los productos que ahí se comercializan y de que se comience a operar en los locales, cuando existan las condiciones sanitarias para ello.