En conferencia de prensa directivos de dicho centro de investigación, dieron a conocer la emisión de la convocatoria para sus programas de posgrado.
Adrián Quintero Gutiérrez, director del Ceprobi precisó que se ofertan tres opciones: el Doctorado en Ciencias en Desarrollo de Productos Bióticos; y dos maestrías, una en Ciencias en Desarrollo de Productos Bióticos y otra en Ciencias en Manejo Agroecológico de Plagas y Enfermedades.
Los aspirantes serán sometidos a un proceso de selección, refirió el subdirector académico y de investigación Alfredo Jiménez Pérez, quien explicó que los programas están abiertos a egresados de áreas tales como biotecnología, ingenierías y biología, entre otras.
Comentó que actualmente hay 80 investigadores, 28 maestros en ciencia y “los alumnos egresados contarán con los conocimientos, habilidades, destrezas y principios éticos que les permita realizar el diagnostico de problemas fitosanitarias”, agregó.
Martha Lucía Arenas Ocampo, subdirectora de Servicios Educativos e Integración Social, detalló que para el Doctorado en Ciencias en Desarrollo de Productos Bióticos, el registro al proceso a más tardar será el 30 de abril, la entrega de documentos el 4 de mayo y el inicio de semestre el 2 de agosto. En el caso de la Maestría en Ciencias de Desarrollo de Productos Bióticos, el límite de entrega de documentos será el 24 de mayo, las inscripciones serán del 26 al 30 de julio, y el inicio de semestre el 2 de agosto; las líneas de investigación que realizarán serán Biotecnología Vegetal y el estudio y aprovechamiento de biomoléculas.
Para la maestría en Ciencias en Manejo Agroecológico de Plagas y Enfermedades, la entrega de documentos será hasta el 22 de febrero en un primer periodo, el segundo el 24 de mayo y las líneas de investigación son alternativas ecológicas al manejo de enfermedades y plagas insectiles y ecología química de insectos.
Arenas Ocampo mencionó que todos los alumnos podrán solicitar la beca al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) o al Instituto Politécnico Nacional (IPN), en caso de cumplir con los requisitos que indican las instituciones.
Diagnóstico situacional revela que la obesidad infantil comienza a presentarse en nivel primaria
El director del centro señaló que éste es uno de las 19 instituciones de educación superior y de investigación más importantes en Morelos y a nivel nacional. En éste se desarrollan proyectos que permitan dar soluciones a problemas específicos tanto del país como en la región y el estado.
En este contexto hizo referencia a uno de los trabajos que se desarrollan actualmente en el Ceprobi. Se trata de un diagnóstico nutricional enfocado a problemas relacionados con el sobrepeso, la obesidad y trastornos de la nutrición.
Mencionó que el estudio contempla una investigación a desarrollarse aún durante los próximos dos años, pues abarcará todos los niveles de formación hasta media superior. Pero en este momento, los investigadores ya han concluido la etapa en la muestra seleccionada en preescolar y llevan un importante avance en primarias.
Entre los datos detectados, destacó que los niños se van sin desayunar al jardín de niños, lo que impacta en niveles de glucosa muy bajos y por tanto en un muy posible deficiente aprendizaje.
Además, encontraron que el 12% de los estudiantes tiene parásitos, lo que incide en su nutrición.
Expuso que en la siguiente fase estudiarán una muestra representativa de 31 primarias de todo el estado, y a la fecha ya han trabajado en 8 planteles de zonas urbanas, donde ya se ha detectado que comienzan los problemas de obesidad: “es claro, queda de manifiesto de que los indicadores están por arriba del 30%, en promedio, de los niños con sobrepeso y obesidad en esta parte ya analizada, en zonas urbanas de la región oriente del estado en algunas escuelas llega hasta el 50%”.
Conforme a estos avances, el investigador explicó que el estudio está enfocado a lo que tiene que ver con el síndrome metabólico, que es un conjunto de problemas de salud que se presentan a la vez como la diabetes mellitus, obesidad y trastornos de lípidos, como puede ser el colesterol alto, y en lo adultos con padecimientos cardiovasculares.
El doctor Quintero Gutiérrez expuso que con los datos arrojados del proyecto ya pueden establecer que los problemas de obesidad se dan a partir del tercer grado de primaria, cuando la madre deja de cuidar de forma directa la alimentación del menor, y los niños y niñas comienzan a decidir por sí mismo lo que comen.
Destacó se ha observado que “seguramente el factor fundamental es que regularmente lo que los niños encuentran en el interior y el exterior de la escuela son productos no nutritivos, sino carbohidratos, grasas, mejor conocidas como fritangas”.
La recomendación al sector salud y al educativo, que se busca dar es un diagnóstico basado en método científico que les indique qué es lo que se encontró y las alternativas.
“Definitivamente es necesario regular qué es lo que se vende en las escuelas, no sólo en el interior sino en el exterior, de todo lo que se vende alrededor de las escuelas que está fuera de vigilancia en cuanto a higiene y contenidos y ahí tiene que entrar el sector gubernamental a regular”, afirmó el especialista.