Ibeth Rivera Ortiz estudiante del Doctorado en Ingeniería y Ciencias Aplicadas (DICA) que ofrece el Centro de Investigación en Ingeniería y Ciencias Aplicadas (CIICAp) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), desarrolla un proyecto de investigación que consiste en un recubrimiento para mejorar las condiciones del concreto y disminuir la velocidad de corrosión de la varilla.
Ibeth Rivera explicó que para la fabricación de este recubrimiento se utilizan desechos orgánicos de camarón, “de donde se obtiene la quitina, que es un biopolímero que se encuentra en el exoescoleto de los artrópodos, posteriormente extraemos el quitosano, que es el más puro, lo extraemos mediante métodos naturales por medio de enzimas y no se utilizan reactivos contaminantes”, explicó.
La doctorante agregó que el quitosano se ha utilizado como agregado en la mezcla de concreto con cemento, grava y arena, además también se está agregando a la varilla para retrasar su corrosión, “el quitosano cuesta en la industria aproximadamente 30 mil pesos por un kilogramo por lo que la principal ventaja de este proyecto es que se obtiene de desechos orgánicos sin costo, lo cual resulta muy benéfico y no afecta al medio ambiente”.
Rivera Ortiz explicó que ya realizaron pruebas de compactación y se obtuvieron buenos resultados, “en esa misma mezcla se ahogaron varillas para hacerles pruebas electroquímicamente, para ver cómo trabajaba como recubrimiento y de ahí se preparó el quitosano en solución a diferentes proporciones”.
Ibeth Rivera es originaria del estado de Tamaulipas, “este proyecto surgió como continuación de mis estudios de maestría donde se utilizó un polímero inorgánico con buenos resultados y al estar en un estado camaronero teníamos mucho desecho orgánico, de ahí surgió la idea de trabajar con el exoesqueleto del camarón de donde se pueden obtener biopolímeros, que no generan costo y tienen cierta funcionalidad”.
Actualmente ya se ha establecido una cantidad específica para realizar la mezcla que da resultados positivos al aplicarse en la varilla, dijo, por lo que continúan realizando pruebas electroquímicas y siguen corroborando que funcione con el objetivo de saber si hay otras aplicaciones para este proyecto, el cual puede comercializarse a futuro.
Ibeth Rivera comentó que en dicho proyecto contó con la asesoría de Elsa Carmina Menchaca Campos y Jorge Uruchurtu Chavarín, ambos profesores investigadores del CIICAp.
