La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) continúa el operativo decembrino en la entidad, que durará hasta que concluya el periodo vacacional. La institución llamó a la población a denunciar cualquier irregularidad en los módulos y oficinas de la delegación.

Luis Alonso Bonifaz Muñiz, encargado de despacho de la dependencia federal en Morelos, informó ayer miércoles que la mayoría de las quejas hasta ahora han estado relacionadas con el incumplimiento de precios ofertados o la falta de éstos a la vista del público.

Aunque no precisó el número, apuntó que las inconformidades se concentraron en mayor medida en centros comerciales y almacenes.   

Expuso que en la procuraduría, por norma, sólo se suspenden labores los días 25 de diciembre y 1 de enero, pero los demás días se mantienen guardias en los módulos y oficinas de la delegación.

El funcionario federal reiteró el llamado a la población a acudir a la Profeco, en caso de irregularidades.

Cabe recordar que la Profeco a nivel nacional inició operativos dirigidos a las actividades propias de estos meses, tanto de prestadores de servicios turísticos por las vacaciones, como en los comercios, establecimientos con venta de juguetes, restaurantes y mercados en lo que se refiere a alimentos.

La Profeco ha instalado 29 módulos en aeropuertos y 35 en centrales de autobuses del país, entre ellas las de Cuernavaca. Adicional a la presencia física de funcionarios de Profeco, los consumidores disponen de los servicios de Concilianet y Conciliaexprés, para que cualquier queja sea atendida y resuelta.

La institución dio a conocer la postura del actual titular federal Francisco Ricardo Sheffield Padilla, quien expuso que el propósito es inhibir irregularidades y prevenir errores; no es el objetivo el aplicar multas y sanciones. Con este operativo, la Procuraduría Federal del Consumidor busca garantizar que los derechos de los consumidores sean respetados durante estas festividades y vacaciones de fin de año, por ello se llevan a cabo de igual manera operativos para verificar que se cumpla con la norma de colocar precios a la vista del público, que se respeten descuentos, así como que las básculas en mercados y tianguis, donde se venden alimentos, estén calibradas correctamente.