Aseguran que la CFE informó mal al presidente, que anunció una consulta interestatal sobre el tema.

Habitantes de Huexca e integrantes de la Asamblea de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua rechazaron los estudios que arrojan datos a favor de la termoeléctrica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE); temen una “consulta amañada” y llamaron al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a constatar con sus propios ojos los efectos de dicha planta y riesgos por el gasoducto.

En conferencia de prensa, líderes de la organización e integrantes de la agrupación consideraron que el Ejecutivo federal no recibió información verdadera sobre el caso.

Cabe recordar que AMLO anunció este viernes que la decisión sobre la continuación del proyecto de la termoeléctrica, será sometida a consulta ciudadana.

Al respecto los inconformes dijeron estar desconcertados y enojados porque pidieron una audiencia personal con López Obrador, en virtud de que no confían en el delegado del Gobierno de México en Morelos, Hugo Erik Flores Cervantes. “Nuestra lucha es auténtica, venimos desde hace varios años luchando contra este megaproyecto, le pedimos una reunión para informarle, porque lo que vimos es que su súper delegado Hugo Erik al final está haciendo las mismas prácticas que hizo Graco… Esta película ya la vimos, es el mismo resultado, vimos lo que dijo en esa ficha y dijo lo que dijeron los antiguos de la CFE que no contamina, que no es riesgo, hablan de Yecapixtla… a Huexca lo desaparecen”.

A través del vocero Jaime Domínguez Pérez, anticiparon que no pueden aceptar la consulta, ya que no confían en quienes la van a llevar a cabo de forma “amañada y a modo”, con la misma estrategia “del garrote y la zanahoria” que aplicaron en administraciones pasadas. Es decir con promesas falsas de beneficios o la presión y agresión a quienes no aceptan la termoeléctrica. Comentaron que ya anteriormente les prometieron que les darían el suministro gratis y por el contrario el costo de la energía se incrementó.

Pidieron al presidente que recuerde que desde el año 2013 (de lo cual existe un video), expresó que colocar en ese lugar una termoeléctrica, era como poner un basurero en Jerusalén. “Hoy exigimos que cumpla lo que prometió en campaña… Nosotros esperábamos que hubiera otra cosa, que nos dieran tiempo, que nos escucharan e hicieran estudios serios. No entendemos la rapidez con la que quieren echar a andar este proyecto, lo que no hizo Peña Nieto, lo hará ahora”.

Los voceros refutaron que haya "activistas vendidos", al sostener que llevan más de seis años luchando contra el megaproyecto: “Nosotros no tenemos interés económico, porque nuestras vidas no tienen precio… Muchos de nosotros sufrimos persecución, cárcel, tortura, la Comisión Independiente de Derechos Humanos nos ha acompañado y ha documentado todo esto”.

Expusieron que durante los tres meses que duraron las pruebas preliminares del gasoducto, hubo efectos en la salud de habitantes del lugar, tales como dolores de cabeza, de oído, pérdida auditiva, vómito, estrés en los niños, entre otros.

“Además esa agua que salía de la termoeléctrica salía roja. No nos pueden decir que es un agua limpia porque trae materiales pesados y no cualquier planta tratadora puede eliminarlos.  Y reto al señor presidente a que se tome un vaso de agua de ésa que va a despedir la termoeléctrica”, aseveraron.  

Finalmente reiteraron que hay estudios científicos que prueban el riesgo que implica la introducción del gasoducto en la zona de influencia del volcán Popocatépetl y en lo que ahora –ha quedado demostrado- es una región sísmica.