¡Hoy en día tenemos que tener la paciencia de un japonés, mis brothers. ¡Me cae! ¿por qué se lo comento mi Ching- Wong? porque, entre los "vacuneros" y candidatos por doquier nuestra "capirucha" Cuernabaches Morelhoyos está de cabeza. Pero, bueno, pos’ ya qué. Seguimos "campaneando" con la usual sobredosis de locura lúcida, distinguidos lectores. Seguimos "poniéndole" al camello como auténtico y verdadero vasallo, sin embargo, contento y más agradecido que un perro porque el día de hoy tengo la oportunidad de trabajar gracias al Supremo.
Desafortunadamente, la vida no es color de rosa, mis brothers, ni "el león es como lo pintan", dice la sabia conseja popular, que jamás se equivoca. La "verdadera" es que tenemos que enfrentarnos a controversiales y muy marcianas ideologías de diversos matices, situación que a todas luces "acalambra" la precaria estabilidad emocional de la que pudiéramos estar gozando en la actualidad. Me cae que no me canso de comentarlo, cuate lector. Los seres humanos, desde siempre, hemos buscado la guerra y no la paz. Hoy en día, en los habituales ambientes laborales, está usted trabajando muy tranquilo y sin previo aviso ya le metieron el pie o un "rodillazo" o de plano lo "machucaron", porque a "alguien" no le agrada su forma de trabajar, de vestir o de hablar. ¿Entonces? ¿Para que la hacemos de tos? (cambiemos el "porqué" por el "para qué").
De todas formas se supone que vivimos en un país "democrático". ¿No es así'? Todos tenemos la libertad de expresar nuestras ideas (bueno, se supone) ¿o depende? ¡bueno!, a veces hasta nuestra forma de caminar les llega a molestar a dos tres neuróticos. No cabe duda de que, pese a que le hayan dado su "maquilladita" a las cifras estadísticas, hay que decirlo, "un mundo nos vigila”, mis brother.
¡No cabe duda! La neurosis colectiva es un hecho consumado y no nada más en tierra médica, sino a nivel mundial, brothers. ¡Está capri! Y para que no considere su majestad que soy un hablador bien hecho, quien me pasó corriente con este dato que le corro fue la banda de Neuróticos Anónimos, que sí le sabe en este "coto" de la neurosis. Por si usted no lo sabía y para que deje de hacer pucheros, existe un 99% de personas inestables emocionalmente. ¿Impresionante, verdad? Y para "acabarla" de chiflar, en el área laboral la "grillita" habitual de dos o tres grupos de inconformes contribuye a esa precaria estabilidad que, reitero, ¡estamos y seguimos viviendo! ¡chale! ¡cada quien sus chicles y a vender! ¡pa´qué tanto brinco estando el suelo tan parejo, brothers! usted a lo suyo, mi brother.
Entonces, no nos queda otra que "entrarle" al juego, aguantar "candela" y como dicen, aguantar posición al fin que "las cosas caen por su propio peso". Aprendámosles entonces ¡eso sí ! como manejan el control de las emociones, reitero, donde son unos maestros. Pa’ acabar pronto, mi brother, y como conclusión, no se entregue porque le dan montaña. Ahí se las dejo de tarea ¡Hasta la ostra!