José Luis confía en que en la temporada de frío pueda vender mejor sus churros.
“Recorro todos los días las calles de Chamilpa y a veces de Ocotepec, pero la verdad no hay muchas ventas y la gente ya casi no quiere salir de sus casas”, se queja José Luis González, quien se dedica a la venta de churros en la colonia Tlatepexco del poblado de Chamilpa.
“… antes podías ver a los niños con sus papás en las calles paseando o jugando y ellos eran los que nos compraban y por eso teníamos ventas” apuntó.
Entrevistado por La Unión de Morelos, el hombre dijo que la inseguridad también le afecta porque “los clientes nos comentan que ya no salen muy tarde de sus casas por miedo a que los asalten, ya que por esta zona está bien feo con los robos” apuntó.
El comerciante dijo que espera que con el frío las ventas empiecen a crecer, porque “siempre se les antoja unos churros con café. Los doy al mismo precio, nosotros no podemos darnos el lujo de aumentar el precio ya que entendemos a la gente”.
“Toda mi vida me he dedicado a vender churros, he podido sacar adelante a mi familia y sí me siento mal porque la gente ya no quiere comprar. A lo mejor es por el covid-19 o por la inseguridad, pero pase lo que pase seguiré con mi negocio”, dijo.
José Luis aprovechó para invitar a la gente a consumir productos locales: “me gusta lo que hago. La verdad cada vez que me compran y que me dicen que mis churros están ricos me da alegría, porque la gente no se olvida de sus raíces”.