De acuerdo con su pliego petitorio, entregado la semana pasada a las autoridades de la institución, no han recibido incremento salarial desde hace tres años y no cuentan con el equipo de protección para salir a investigar acciones realizadas por la delincuencia organizada.
Particularmente, todos los elementos de la Policía Ministerial inconformes se han colocado un moño rojinegro en el hombro o en el pecho como señal de su protesta por las magras condiciones de trabajo que enfrentan, en las que no cuentan ni con papelería en las oficinas.
En tanto, a la oficina de control y mando de la procuraduría estatal comenzaron a llegar amenazas contra cuatro policías ministeriales, a los cuales presuntamente el crimen organizado los involucra en el asesinato de siete personas en Las Brisas, donde fue asesinado el hijo del poeta Javier Sicilia.
Las amenazas llegaron vía telefónica y advirtieron que los cuatro elementos serían levantados en las siguientes horas, confirmaron fuentes policíacas, quienes precisaron que estas condiciones laborales han complicado el desempeño de su trabajo y de no resolverse el siguiente miércoles, se irán a huelga.