Durante los primeros meses de la pandemia se limitó el proceso de trasplantes de órganos en el país, sin embargo, se ha reactivado esta actividad y el año pasado se lograron seis donaciones en el Hospital Regional número Uno del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Cuernavaca.
El 27 de febrero se conmemora el Día Internacional del Trasplante de Órganos y Tejidos. En este contexto, las instituciones de Salud, como el IMSS, llamaron a la población a aceptar la donación y dejar expresamente esta voluntad a la familia, para brindar una segunda oportunidad de vida a más personas.
La doctora Angélica García Pérez, coordinadora hospitalaria de donación de órganos y tejidos en el Hospital Regional número Uno del IMSS en esta ciudad, dio a conocer que el año pasado se lograron seis donaciones multiórgánicas en esa institución, durante las cuales hubo donación de hígado, corazón, riñones, córneas, músculo esquelético y piel.
Con seis casos se logró mejorar la calidad de vida o salvar a cientos de personas más, pues en cada caso es factible procurar diversas partes del cuerpo que son destinadas a diferentes personas.
En la primera donación del año 2021 se salvaron ocho pacientes más, pues se trató de una donación multiorgánica.
La doctora García Pérez explicó que debido a la pandemia se restringieron todas las actividades relacionadas con trasplantes, especialmente durante los primeros meses, porque todos los recursos humanos y materiales se volcaron a la atención de pacientes con covid. Además, fue necesario garantizar las condiciones de bioseguridad, tanto para receptores como para todo el equipo de personal que interviene en los procesos hospitalarios.
Destacó que en cuanto fue posible y hubo condiciones idóneas, se reactivó esta área. Enfatizó que jamás se dejaron de realizar labores de vigilancia y detección de potenciales donantes, en atención a las solicitudes que se realizan a nivel nacional.
Comentó que esta etapa ha sido compleja en todas las actividades médicas y ahora se suman más pruebas a las que de por sí ya se realizaban, para determinar la viabilidad de los trasplantes, así como de la procuración de órganos. Actualmente, además de los estudios habituales, también se tienen que efectuar pruebas de SARS-Cov- 2.
“Todos los médicos, operativos, directivos, han trabajado arduamente para que el programa se reactive y darle oportunidad a tantas personas que están en la lista de espera, que pueden perder la vida sin que llegue una segunda oportunidad”, señaló.
La doctora Angélica García resaltó la importancia de erradicar algunos mitos o temores y expuso que no por traer un documento (como la licencia de manejo) que diga que somos donantes voluntarios ya se es donador en automático. “Tampoco hay que aterrarnos o pensar que no nos darán la atención médica posible”, expresó al dejar en claro que esta decisión únicamente puede ser tomada por la familia y una vez que ya se han agotado todos los recursos médicos científicos posibles para salvar a una persona y cuando esta muere.
“De hecho, tenemos más probabilidades de enfermar y llegar a ser receptores, que de donar”, externó. Y es que se tienen que dar ciertas situaciones para que un individuo sea compatible o esté en condiciones físicas para que sus órganos o tejidos sean susceptibles de ser trasplantados.
La profesional de la salud indicó que afortunadamente cada vez hay más sensibilización y familias que en esos tristes momentos han optado por dar sentido a la pérdida de un ser querido cercano, dando una segunda oportunidad de vida a otras personas.
No obstante, de cada diez que expresan su disposición a donar órganos o tejidos, sólo dos se concretan en la práctica.
En entrevista declaró que es fundamental que la gente se informe, se acerque, navegue por los sitios web oficiales para que estén conscientes de cuáles son los procedimientos y demás aspectos de la donación.
Una vez informadas, las personas deben expresar claramente su voluntad y platicarlo para no tener que dejar esa difícil decisión a sus familiares.
“Es una oportunidad de trascender, a veces es posible salvar a un desconocido, pero no sabemos cuándo un desconocido salve a un ser querido o a nosotros mismos… esta es una vía para realmente trascender”, concluyó.