Brayan aprovecha sus ratos libres para estudiar o hacer tareas
Brayan estudia la licenciatura en medicina y al mismo tiempo trabaja como repartidor de alimentos por medio de las plataformas digitales para apoyar con los gastos de la escuela a sus papás.
El entrevistado radica en el pueblo mágico de Tepoztlán, pero señaló que en ese municipio hay muy pocos restaurantes afiliados a la plataforma de Didi Food, por lo que todos los días tiene que trasladarse a la capital morelense.
De su trabajo comentó que hay días en los que ha logrado realizar hasta veinte entregas de alimentos, pero también hay días malos.
Por ejemplo, refirió, el pasado 8 de marzo varios negocios del primer cuadro de la ciudad cerraron sus puertas antes de su horario normal, por lo que solo consiguió realizar un servicio en todo el día del cual obtuvo 30 pesos.
Brayan -entrevistado sobre la calle Netzahualcóyotl del centro de Cuernavaca- dijo que en días festivos y fines de semana obtiene mejores ingresos. Sin embargo, entre semana tiene que esperar hasta dos horas para recibir un pedido para la entrega.
En los ratos libres -indicó- aprovecha para estudiar o hacer tareas que le dejan sus maestros.
“Hay días en los que no cae ni un viaje, pero gastas dinero en gasolina, recargas de internet y tiempo porque tenemos que estar moviéndonos de un lugar a otro para poder tener pedidos”.
Refirió que empezó a trabajar en la aplicación hace tres meses, tras concluir su relación laboral en una tienda de conveniencia donde difícilmente le otorgaban los permisos para faltar y acudir a sus clases presenciales o a realizar prácticas.