En esta temporada Graciela comienza a vender sus juegos de jardín y albercas.

“Ya es temporada vacacional y empiezan a remodelar los restaurantes, las casas y todo lo que tiene que ver con las áreas infantiles” explicó Graciela Hernández Chacón, quien se dedica a la producción y venta de juegos de jardín y albercas, en el poblado de Oaxtepec, municipio de Yautepec.

La fabricante menciono que se lleva mucho tiempo en elaborar su mercancía: “hacerlos es muy laborioso, nos toma mucha mano de obra para dejarlos así como están. Todo lo hacemos aquí, después de que ya están listos, hay que ponerles el color. Hacemos las albercas, las resbaladillas sencillas hasta resbaladillas con las casitas, también hacemos lo que son los carruseles de animales o de figuras de caricaturas. Cada juego nos toma un tiempo de cuatro a seis semanas en hacerlos”.

Entrevistada por La Unión de Morelos, la mujer señaló que no puede regalar su trabajo, porque “nos toma mucho tiempo, nos cuenta mucho dinero y además son cosas que duran muchísimo tiempo. Claro que es dependiendo de cómo se cuiden las cosas. Por eso no podemos bajar el precio, porque no es algo que vengan a comprar mucho. Esto se vende por temporadas, sobre todo en las vacaciones”.

“Este es un trabajo peligroso. Manejamos thinner, herrería, soldadura, pinturas. Hace un tiempo, uno de nuestros trabajadores tuvo un accidente y fue a dar al hospital. Nosotros tuvimos que pagar parte de su recuperación. A veces la gente no valora esas cosas, y piensan que es algo bien fácil de hacer. Como solo son tubos ensamblados piensan que no es gran cosa” apuntó.

Graciela Hernández Chacón relató que en los dos años de pandemia cerro su negocio: “tuve que cerrar mucho tiempo, es que no teníamos ventas. No podía estar abriendo porque era pagar salarios y no teníamos con qué hacerlos. Además, todo el material subió, nos quedamos con muchos pedidos que ya no nos liquidaron por falta de dinero”.

“Mis mayores clientes son los condominios y los jardines de niños, los kinders, que son lugares que ocupan mucho el área infantil y cambian los juegos o vienen a repararlos cuando ya están picándose por el agua o ya de plano por el uso. La reparación, entre comillas no es muy cara, pero sí le tenemos que poner el parche y la pintura, pero no es muy difícil de hacer” remató.