José Manuel asegura que sus ingresos son similares a los que obtiene un operador.
Aunque su papá lo ha capacitado para que trabaje como operador del transporte público, José Manuel afirma que prefiere ser checador porque es menos estresante y, además, sus ingresos son similares a los que obtiene un conductor.
Desde hace año y medio se dedica a registrar el tiempo de diferencia que llevan los operadores de la Ruta 11 y refiere que le gusta esta actividad, porque gana bien y no se estresa.
“Aquí se gana bien. A veces es estresante porque hay muchos carros y pasan muy seguido, pero en cuanto a ingresos no me va mal y en ocasiones junto hasta 500 pesos y trabajo siete horas al día”.
Dijo que su papá trabaja desde hace 16 años como operador del transporte público y como hijo ha sido testigo de las largas jornadas que dedica al volante y a veces sin descanso a la semana. Por eso optó por no seguir el mismo camino.
“Mi papá me estuvo enseñando para que trabaje en la ruta, pero no creo poder porque es mucha responsabilidad. He visto que mi papá casi no descansa y trabaja muchas horas al día. Además, tiene que lidiar con el tráfico y el mal humor de la gente”.
José Manuel está consciente de que por ser trabajador informal no tiene derecho a prestaciones ni seguro social, pero dice que no tiene inconveniente porque sabe administrar su dinero.