Carlos busca los tianguis más concurridos para vender sus productos.
“La verdad, el material está bastante caro, sigue subiendo y subiendo. A veces solo sacamos lo de la mano de obra que le metemos para hacerlos. Esto solo para algunas cosas, porque hay otras que casi no le ganamos nada”, afirmó Carlos Ortiz, quien se dedica a la elaboración y venta de anafres y comales de acero en el Centro de Cuernavaca
“Toda la familia se dedica a esto. Están primos, tíos y hermanos que nos dedicamos a esto por herencia. Estamos divididos entre México y Cuernavaca, aquí vendemos solo en los tianguis más importantes, en los centrales donde va mucha gente”.
El entrevistado aseguró que las parrillas y comales son lo que más vende. “La gente viene a comprar con nosotros lo indispensable para la cocina o para el negocio. Las parrillas están muy de moda y los comales para las tortillas no puede faltar. Son las cosas que más buscan y las que casi siempre vendemos”.
“Nos han llegado a pedir las cosas más personalizadas, como las parrillas más grandes otros más chicos y que tenga más espacio para el carbón o para poner la carne, pero todo eso eleva el costo del anafre o de cualquier otro producto” apuntó.
Para rematar, Carlos Ortiz comento que le gusta vender en los tianguis, aunque “no me gusta ir a todos, porque son pocos los que realmente piden a los comerciantes y a los clientes que usen el cubre bocas y que a demás se cuiden. Se vende bien porque va mucha gente y es más fácil que te conozcan así, te vas armando de clientes, pero no por eso vamos a dejar de cuidarnos”.