La mitad de la población mundial presenta algún tipo de parasitosis: OMS.
Con el objetivo de generar alternativas más eficientes para el tratamiento de enfermedades parasitarias intestinales, un grupo de alumnos de licenciatura y posgrado Facultad de Farmacia trabaja en el diseño de nuevos compuestos antiparasitarios, informó Gabriel Navarrete Vázquez, profesor investigador de esa unidad académica de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
El entrevistado explicó que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 50 por ciento de la población mundial presenta algún tipo de parasitosis, es decir, tiene algún parásito o gusanos que por el consumo de agua y alimentos contaminados provocan diarrea.
Los niños, dijo, son el sector con más riesgos por la parasitosis, debido a que provoca el síndrome de la mala absorción de nutrientes, que impide a los infantes un crecimiento adecuado, problemas cognitivos y otras dificultades de salud en los primeros años de infancia.
"Se recomienda desparasitarse dos veces al año y existen en el mercado farmacéuticos diversos, medicamentos. La desventaja es que los parásitos han desarrollado resistencia a los tratamientos, por lo que es necesario encontrar alternativas que puedan ser utilizadas tanto por adultos como por niños, sin reacciones secundarias graves”, manifestó Navarrete Vázquez.
Destacó que el Laboratorio de Química Farmacéutica de la UAEM trabaja en el diseño de compuestos alternativos mediante métodos de química orgánica que puedan tratar enfermedades parasitarias, sobre todo en cepas resistentes a los fármacos actuales de venta en el mercado, sin efectos colaterales ni reacciones de toxicidad.
"Los resultados del Laboratorio de Química Farmacéutica de la UAEM están en la etapa preclínica, los nuevos compuestos y moléculas cuentan con la calidad, seguridad, eficacia y poca toxicidad en las pruebas que realizamos en ratones de laboratorio", dijo el investigador, al señalar que varios de los compuestos mostraron efectos potentes para atacar la Trichomonas vaginalis, que es una de las enfermedades de transmisión sexual no virales más comunes y con mayor caso de prevalencia en el estado de Morelos.