Salomón ahora es “checador”.
Durante 24 años, Salomón Martínez trabajó como operador del transporte público hasta que enfermó de los riñones y pulmones, lo que le obligó a dejar el volante.
Tras su enfermedad -contó- se dedicó a trabajar como chofer particular mientras se recuperaba; sin embargo, hace unos 12 días salió a las calles y comenzó a laborar, pero ahora como checador de “rutas de paso”.
Si bien, reconoce que sus ingresos no se comparan con lo que recibía como chofer, dijo que la ventaja es que ahora solo trabaja para él y lo poco que junta al día le alcanza, por lo menos para comer y solventar los gastos de su casa.
Cuando cumplió la mayoría de edad -apuntó- empezó su vida laboral. Primero como chofer de taxi, después como conductor del transporte público y más adelante como chofer particular.
“Me gusta mucho manejar, pero lo tuve que dejar porque me enfermé; empecé con los riñones y después los pulmones, yo creo que es por la mala alimentación que llevaba y porque casi no tomaba agua; todo eso fue lo que me afectó”.
En su actividad como checador de “rutas”, refirió, su jornada es de ocho horas.
Por la crisis económica que ha dejado la pandemia de covid-19, a veces con mucho esfuerzo reúne entre 130 a 150 pesos, pues más de la mitad de los operadores no le dan propina.
Señaló que su labor es un poco estresante, debido a que cuando se le juntan los camiones no puede informar a todos los operadores el tiempo de diferencia que llevan de sus colegas.