Apenas tiene tres meses en la “ruta”
Moisés señaló que ser operador del transporte público es una labor estresante porque diariamente tienen que lidiar con el tráfico y con algunos pasajeros que se molestan por cualquier situación.
Dijo que su trayectoria al volante es de tres meses, y durante este tiempo ha conocido a todo tipo de personas. Por ejemplo, indicó, hay pasajeros que no anticipan su parada y todavía se molestan porque el chofer se detuvo una cuadra adelante.
También se ha encontrado con personas que están de mal humor y se quejan porque dicen que el operador conduce muy lento y tienen prisa por llegar a su destino.
“Yo era carpintero, pero se acabó el trabajo y por eso ando en la ‘ruta’. Este trabajo también me gusta, pero hay que levantarse muy temprano y a veces te encuentras con pasajeros que nada les parece, luego no anticipan su parada y encima se enojan, pero yo no sé dónde se va a bajar cada uno”.
Aunque Moisés tenía experiencia en el manejo, dijo que durante tres días recibió capacitación sobre temas de vialidad y trato al pasajero.
Además, le informaron sobre las tarifas que se manejan, aun así, reconoció que los primeros días los nervios lo traicionaron y en algunos casos entregó mal el cambio, pero se dieron cuenta y lo corrigió.
“Al principio me equivocaba con los cambios, a veces daba de más o menos y algunas personas me decían ‘me cobran tanto’ y ya les entregaba bien, aunque otros se enojaban porque no sabían que estaba aprendiendo”.