César lamenta que hay poco trabajo en las calles.
César Tapia tenía un trabajo estable en Cancún, pero dijo que hace 15 días se vio obligado a regresar a Morelos para atender un problema familiar y, para solventar sus gastos, buscó trabajo en diferentes empresas, pero no tuvo suerte y sólo encontró como chofer de taxi.
Desde hace tres días, César maneja un taxi. Aunque asegura que le agarró cariño a este oficio, lamentó que hay poca solicitud del servicio, por lo que sus ingresos económicos son de unos 200 pesos. Además, necesita por lo menos 300 diariamente para la gasolina.
"En Cancún trabajaba como repartidor de pizzas, pero tuve que regresar para atender algo de una pensión, y dije: 'mientras voy a buscar trabajo', pero sólo encontré en el taxi, y me gustó porque no hago mucho movimiento, ya que tengo un problema en las rodillas y no puedo estar de pie tanto tiempo".
Sin embargo, lamentó que el miércoles, con mucho esfuerzo, logró realizar siete viajes, de los cuales obtuvo alrededor de 300 pesos.
"Para mí, el taxi es un trabajo relajado, aunque hay pocos clientes y, por lo tanto, es poco el dinero que uno lleva a su casa, pero tampoco lo puedo dejar, ya que tengo una familia que mantener y no puedo quedarme en la casa a descansar".
Comentó que en cuanto resuelva su problema familiar, regresará a Cancún, porque allá obtiene mejores ingresos económicos.