En el Día del Médico, Daniel Álvarez Escobedo transmite la importancia de ayudar a los profesionales de la salud con la corresponsabilidad en el cuidado del bienestar propio y en el seguimiento puntual de las indicaciones médicas.

“Que haya salud para toda la gente” es el deseo de los galenos este 23 de octubre.

Hoy se celebra el Día del Médico, y entre los principales deseos de este grupo de profesionales está el que no se repita una pandemia, el avance de la medicina preventiva, y que sus pacientes -en corresponsabilidad- cumplan con sus indicaciones.

Según la Secretaría de Salud federal, en México se celebra el 23 de octubre de cada año a profesionales de la medicina, fecha acordada durante la Convención de Sindicatos de Médicos Confederados de la República Mexicana, llevada a cabo en Cuernavaca, Morelos, en 1937, y se deriva también de la inauguración del Establecimiento de Ciencias Médicas en 1833.

En Morelos hay miles de médicos. Tan sólo en el Instituto Mexicano del Seguro Social hay 702 hombres y 708 mujeres con plaza de médico.

Para la mayoría de las personas que ejercen esta profesión, el peor momento y reto que han vivido en su trayectoria fue la reciente pandemia de covid 19, en la que muchas perdieron a vida o a colegas, y otras más a familiares.

Para médicos como el doctor Daniel Álvarez Escobedo, este episodio marcó un antes y un después para la medicina de los tiempos actuales, y representa un punto de partida sobre la proyección a futuro en el ejercicio de su trabajo.

Como miles de médicos en la entidad, labora desde hace décadas. Es médico en la unidad de medicina familiar en la unidad número uno del IMSS, en Cuernavaca, desde hace 19 años, y egresó de la carrera desde hace 24.

Su labor se desarrolla en la primera línea de atención, es decir, quien recibe de manera cotidiana a los pacientes, pues los médicos familiares son quienes atienden en primera instancia, y en caso de detectar complicaciones, canalizan a los usuarios a otros servicios de especialidad.

De acuerdo con su testimonio, los médicos aprenden a enfrentar la muerte y la vida. “Es una  pregunta que nos hacemos todo el tiempo, estudiamos con el afán de ayudar y servir… es duro cuando tratamos a una persona y ocasionalmente sabemos que tiene mal pronóstico de vida a corto o largo plazo. Es difícil, tienes que aprender a sobrellevarlo”.

Como la inmensa mayoría, llama a la población a tomar en cuenta que son humanos como cualquier otra persona y se sobreponen, no es acostumbrado demostrarlo, pero también sufren. “En lo personal, quienes estamos en consultorio de medicina familiar muchos años, nos llegamos a compenetrar con nuestros pacientes, conocemos de su vida, de sus hijos, padres, de su historia y su desarrollo a lo largo de los años. Es complejo, nunca perdemos esa parte de humanismo; por fuera parece que sí, pero la realidad es que no, sufrimos y lloramos cuando sabemos que nuestro paciente murió o pasó a una mejor vida, es muy sufrido, no es una situación sencilla… poco se habla de eso”.

El medico Daniel, quien ha laborado en otras instituciones del sector, considera que la vocación es esencial para quienes desean estudiar esta carrera, que demanda su labor las 24 horas, los siete días de cada semana. Algunos, como éste caso, saben de su llamado desde pequeños, que uno de los principales indicios es querer ayudar.

Aunque continuamente sus pacientes le dan las gracias, considera que una fecha como hoy es importante para recordar a los médicos su compromiso con la gente y, a su vez, recibir el aprecio de quienes reciben la atención.

Siendo médico del IMSS, considera que muchas veces hay quejas o inquietudes, como en cualquier institución del sector. “Somos humanos, estamos formados para ayudar, pero habrá gente que llegue con tanto dolor de corazón, cuerpo o mente, y no estará a gusto con la atención que les demos por muy buena que sea, o la disponibilidad que haya del instituto. Siempre habrá quien no esté de acuerdo. A nosotros, a mí, me queda escuchar la queja y saber si de lo que esta persona se queja es porque no resuelvo la situación, o es por una cuestión administrativa o de otro tipo… no siempre está en las manos del médico, pero somos quienes enfrentamos o recibimos las críticas generalmente”.

En múltiples ocasiones, son quienes enfrentan ahora consecuencias legales, además de duras críticas. “Ahora mucho en redes sociales, se juzga muchas veces y se condena hasta de forma anónima y sin conocer en realidad los casos…”

Al preguntar al médico Álvarez Escobedo cuál podría ser el deseo para él y sus colegas en esta fecha, la respuesta podría ser muy sencilla: “que haya salud para toda la gente”.

Sin embargo, refiere que la coincidencia en su gremio es el avance de la ciencia y el fortalecimiento de la medicina preventiva para evitar que se presente otra pandemia como la más reciente de coronavirus, que fue devastadora para todo el mundo; y reducir otras epidemias como enfermedades degenerativas, que son prevenibles si se acude a tiempo a la atención médica.

De fondo, reconoció, uno de los deseos más fervientes de los médicos es la corresponsabilidad en el éxito o el fracaso en la tarea de curar, que los pacientes sigan sus recomendaciones producto de años de formación y experiencia. “Siempre compartimos la responsabilidad. ¿A quién no le gusta que les des indicación y que lo haga como se lo indicas, que se tome las medicinas en los horarios indicados, que siga indicaciones de alimentación, de curación y otras? Que regrese en el tiempo señalado. Esa responsabilidad es gran parte del resultado favorable para el paciente… Estudiamos para ayudar, todos, me atrevo a asegurar, trabajamos con ganas de servir y no de hacer daño… que entiendan que somos humanos y necesitamos que nos ayuden, haciendo el tratamiento que les pedimos”.

En Morelos, tan sólo en la Universidad Autónoma del Estado, en el año más reciente presentaron examen de admisión más de tres mil 800 aspirantes, y sólo permanecerán 110. A nivel nacional, este año presentaron examen para realizar especialidad en todo el país más de 44 mil 859 médicos en busca de un espacio para continuar con su formación.