Desde el pasado sábado, se generó un ambiente de tensión en el Hospital General de Cuernavaca ,José G. Parres, luego del enfrentamiento a tiros registrado esa noche. El clima de inquietud se agudizó la tarde del martes cuando se difundió la versión en el citado nosocomio sobre una probable agresión al hospital, que había sido custodiado por elementos del Ejército y de la Policía Preventiva Estatal y de la Policía Federal. Usuarios del nosocomio señalaron que hubo mucho movimiento, que incluso en algunos consultorios se suspendió la consulta.
Entrevistado al respecto, el dirigente de la sección 29 del Sindicato Nacional de Trabajadores de los Servicios de Salud, Gil Magadán Salazar, dijo que el sentir del gremio al que representa es de indignación y temor por lo sucedido.
Destacó que “los médicos son profesionistas comprometidos con la vida y la salud y por ética, deben dar atención a quien lo requiera y que llegue a esos hospitales, atendiendo a quien sea, con calidad y calidez. Lo que hacemos es un llamado a todas las autoridades de los tres niveles de gobierno a que cumplan con su obligación, así como nosotros cumplimos de atender a toda la población, que ellos garanticen la seguridad a los trabajadores de la salud”.
Consideró, que la seguridad debería ser otorgada a las unidades de salud desde la entradas, por parte de personal capacitado para que den seguridad y que también respeten los derechos humanos de los pacientes y de los médicos y trabajadores de salud, “buscar la forma de acabar con esta situación que se da en todo el país no sólo en Morelos, porque hay un clima de temor no sólo entre los médicos sino para toda la familia”.
Magadán Salazar, dijo que lo más importante es exigir al Estado que brinde la seguridad y que la población sepa que los médicos no tienen nada que ver en otros asuntos, más allá de cumplir con su función esencial de brindar atención y procurar la salud a todas las personas que llegan a sus centros de trabajo, “sin importar quien sea, las autoridades correspondientes son las que atienden temas penales y otros aspectos, los trabajadores de salud, damos nuestro trabajo a favor de quien lo requiera, sin distinciones y sin tener ninguna implicación sobre quien es el paciente o por qué está en ese lugar” recalcó al lamentar que los médicos se vean en una condición de preocupación o de temor al desarrollar su función.