Cleotilde Amador Leal, directora de Centros de Integración Juvenil Cuernavaca, que están sectorizados a la Secretaría de Salud federal, expuso que con base a las personas que son atendidas en esta instancia, han observado que el consumo de drogas ocurre en prácticamente todo el territorio morelense, pero señaló que “hay una alarma por ejemplo y un poco de preocupación en el municipio de Yautepec, donde me doy cuenta a partir de las demandas de servicio tanto para atender a adolescentes como a niños de nivel secundaria, y hay una preocupación de las autoridades escolares en que van identificando casos de chicos que están consumiendo las sustancias”, aunque señaló que lo mismo se ha registrado en Temixco y Huitzilac.
Refirió que la Encuesta Nacional de Adicciones, refleja en términos generales la realidad, y de forma local, el CIJ ha observado que efectivamente el consumo de alcohol es mayor a la media nacional, lo que implica un riesgo para el consumo de cualquier otra droga, porque quienes comienzan a beber productos con alcohol son mayormente menores de edad y en los últimos años se ha incrementado el número de mujeres. “Estamos hablando de que en nuestro caso, el inicio de consumo es desde los ocho y diez años, eso lo vemos en la práctica de todos los días, que ellos están teniendo el acercamiento al alcohol y al tabaco que son drogas lícitas, pero que son la puerta de entrada a las drogas ilegales”.
Por ello advirtió que se tienen que redoblar los esfuerzos en cuanto a la prevención, ya que las drogas ilegales como la marihuana y los inhalables están muy al acceso de los jóvenes.
Explicó que en el centro se da atención a habitantes de todos los municipios, lo que es una muestra representativa de que las personas requieren de atención, pero “siempre hay una mayor exigencia en algunos lugares como los ya referidos”.
Amador Leal indicó que habrán de insistir en la demanda de donación de un predio para crear una unidad de internamiento en el estado de Morelos, pues no existe. “Hay otros casos que no pueden ser atendidos en los actuales consultorios porque algunos pacientes requieren de un proceso de desintoxicación primero, entonces es importante una unidad donde las personas que ya tienen un consumo más avanzado puedan contar con un tiempo de manejo, y luego continuar con tratamiento en consulta externa”.
Comentó que el proyecto que se presentó en la primera ocasión implicaba 37 millones de pesos, aunque el monto se tendría que actualizar, y ahora el cálculo también contaría con la donación del terreno para tal fin.