La citada legislación, vigente desde agosto del 2013, con una fe de erratas publicada en octubre del año pasado, señala claramente que para evitar que los padres de familia tengan que hacer aportaciones económicas en las escuelas, el Estado destinará a cada centro educativo de nivel básico, el equivalente a tres salarios mínimos por cada alumno matriculado. Se especifica también que el dinero se manejará a través de comités escolares que recibirán en una cuenta bancaria, el monto correspondiente en efectivo y se detalla igualmente cuáles son los conceptos en los que ese dinero puede ser usado.
Finalmente, el IEBEM decidió que no aplicará este mecanismo en todas las escuelas, sólo en la mitad.
El director de Planeación del IEBEM, Eduardo Ruiz Ramírez, admitió que la ley ya citada establece un mecanismo preciso que implica la entrega del dinero a directores, en razón de alrededor de 184 pesos por estudiantes.
Pero en virtud de que en algunas de ellas la matrícula es muy pequeña y sería muy complicada la comprobación de recursos, el IEBEM no aplicará ese método, hará una compra consolidada de los insumos y les entregará en especie, no el dinero.
Abundó que hay planteles en los que hay 30, 50 o hasta cien niños y muchas veces el trámite administrativo de apertura de cuentas bancarias y facturación, es muy difícil. Por lo tanto, para esas que representan el 50 por ciento de las más de mil 700, el IEBEM va a manejar ese dinero.
Aclaró -contrario a lo que había declarado ante la directora del IEBEM, Marina Aragón Celis, en cuanto a que se analizaba la posibilidad de usarlo para mejoras de sanitarios, bebederos o impermeabilización- que se usará para los rubros que establece la ley.
Argumentó que ya se hicieron cálculos y no alcanza ese monto para hacer reparaciones o grandes obras.
Cuestionado sobre el cumplimiento jurídico, el directivo manifestó que buscarán algún camino para cuadrar esta decisión.
“Podemos obtener algún acuerdo administrativo que nos permita en este momento hacer la aplicación en esa manera, la idea es respetar por porcentajes asignados a cada escuela, nada más que en lugar de darles la asignación económica, sería en especie”.