Lo anterior se dio a conocer ayer en las salas de juicios orales, donde los tribunales individualizaron las dos sentencias de tres años de prisión para cada uno de los acusados, pero la defensa de uno de ellos anunció que pedirá la libertad de su cliente a través de los beneficios que otorga el Código Penal local.

La primera sentencia fue emitida en contra de Erick Rodríguez Briseño de 23 años de edad, quien el pasado siete de noviembre del año pasado fue sorprendido por la Policía Municipal cuando en la colonia Miguel Hidalgo del mismo municipio, presumiblemente suministraba mariguana a tres mujeres.

El sentenciado se hacía acompañar por otro hombre, el cual logró obtener su libertad a los pocos días a través de una suspensión condicional, pero en el caso de Erick fue más difícil porque fue acusado por la Unidad Especializada contra el Delito de Narcomenudeo de ser él quien hacía entrega de la droga, aunque posteriormente le fue cambiada la medida cautelar a cambio de ciertas obligaciones.

El hoy procesado fue obligado a someterse a un tratamiento contra su adicción y presentar un examen médico para demostrar que sí fue rehabilitado.

El otro caso es el de Froylán Pineda Chávez de 26 años de edad, quien no tuvo la misma suerte que el caso anterior, pues fue condenado también a tres años, pero tendrá que cumplirlos en prisión.

El hoy sentenciado fue detenido también por la Policía Preventiva el 17 de diciembre. Los uniformados le encontraron en sus ropas varias dosis de cocaína.

Al igual que en el primer caso, fue acusado de suministrar la droga, pues traía consigo una dosis superior a lo que permite la ley en la materia.

En el transcurso del juicio sus abogados solicitaron se le permitiera la suspensión condicional (estar libre con las reservas de ley), pero no se le permitió porque el hombre tenía antecedentes penales.

Una de las condiciones que impone el Código Penal es que para otorgar el beneficio ya mencionado, el solicitante no tenga ningún antecedente, pero la Fiscalía que conoció del asunto, anexó como prueba los expedientes JC/2005/2000, JC/2007/02 y JC/23/2012 por los delitos de robo.

Tras lo anterior, el Tribunal de Juicios Orales le negó cualquier beneficio de ley al sentenciado, aunque sus abogados al término de la audiencia comentaron que buscarán ponerlo en libertad a través del recurso de casación (apelación).