A la fecha, las autoridades aseguran que ya se concilió el techo financiero y prácticamente están listos los conceptos de pago. Se espera que todos los trabajadores queden con las mismas percepciones que tenían antes del proceso de depuración.
Blas Eduardo Ruiz Ramírez, director de Planeación del IEBEM, precisó que ya concluyó la etapa de conciliación de la nómina para la centralización. Recordó que desde el 8 de abril inició en Morelos y se convalidaron las 36 mil 200 plazas en total, que existen en el estado en este nivel educativo, tanto horas como de jornada, las cuales ya fueron acreditadas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
La segunda etapa es la de convalidar los conceptos de pago como sueldo, aguinaldo, primas de vacaciones, y demás, para que la Federación los reconozca.
Informó que será en septiembre cuando inicie la prueba del nuevo programa de nómina, para que en el enero la Federación asuma la responsabilidad total.
Comentó que en el proceso hubo unos pequeños grupos de plazas en las que no se encontraba sustento presupuestal, pero que a decir del funcionario, ya están reconocidas.
Refirió que alrededor de 500 plazas fueron las que se sometieron a revisión y quedaron con techo financiero. Dijo que en algunos casos, no coincidían datos por los llamados "registros basura" que quedan en las bases de datos, y que debieron haber sido canceladas desde hace cinco años y que documentalmente estaban canceladas, pero que se quedaron en el registro, sin que ello signifique -subrayó-, que se pagaran. "No las cancelaron en su momento y son plazas que no aparecen, no se pagan pero está el registro histórico y se limpió, por lo que quedó lo que sí se está pagando".
Informó que el listado quedó listo y se envió a la Federación desde mayo, y lo que restaba era conciliar los conceptos de pago, con el fin de que todos quedaran con el mismo sueldo, tal y como se establece en el acuerdo con la Federación.
La complejidad nacional, comentó, fue más allá de lo previsto y por ello se concluyó en este mes de julio, y la prueba podrá arrancar en septiembre.
En el siguiente ciclo escolar, los docentes estarán en los centros de trabajo que les corresponden, conforme a la nómina, una vez que terminó el reordenamiento.