La fiscal Especializada en Delitos de Alto Impacto, Adriana Fernández Pineda, informó que los casos de simulación de secuestros disminuyeron considerablemente, a partir de la campaña mediática que advierte que esta conducta es un ilícito.

Indicó que anteriormente una de cada cuatro denuncias por privación ilegal de la libertad resultaba ser un secuestro simulado, y actualmente el número se redujo a un autosecuestro por cada siete denuncias.

Fernández Pineda explicó que la Fiscalía General del Estado judicializó  cerca de una decena de casos de autosecuestros, sin embargo, el principal  obstáculo para sancionar la simulación de plagios ha sido la misma ley y las familias de la víctimas falsas.

“Si hemos llevado alrededor de 11 casos a juicio, pero el asunto es que la mayoría de las supuestas víctimas no pueden ser detenidas porque la ley sólo establece una pena no privativa de la libertad de 200 a 700 días de trabajo en favor de la comunidad, y por otro lado, quien tendría que imputarle ese delito  es su propia familia y entonces ellos no quieren ir a juicio”, señaló.

Además, la fiscal especial indicó que los jueces de control y juicio oral no quieren llevar a juicio estos asuntos porque los consideran de bagatela.

Por ello, dijo, a través de conversatorios se busca acercamiento con los jueces del Tribunal Superior de Justicia para pedirles que no desestimen estos casos de falsas víctimas porque se genera impunidad y el desgate institucional.

También hizo un llamado a los diputados federales para que el autosecuestro sea sancionado con pena privativa de la libertad.

“Nosotros estamos trabajando en conversatorios con ellos para decirles que tenemos que trabajar en el tema y que no haya impunidad en esto ¿Para qué? Pues para que no se repita. Y por el otro lado, estamos pidiendo también a los legisladores federales que impongan una sanción privativa de la libertad para frenar ese tipo de circunstancias porque nos despliegan, como les dije, tiempo de horas-hombre, recursos y un desgaste institucional, y además una muy mala imagen para nuestro estado”, afirmó.