Las inconformes dijeron que han expuesto esta problemática al director José Alfredo Mata Torres, e incluso les han dado parte de que en el interior de la escuela se han registrado peleas entre los alumnos y él sólo responde que: “no se quiere meter en problemas y los policías vienen, levantan lo que ellos dicen sus bitácoras y se van, no hacen nada”.
Recordaron que incluso la escuela ya está plenamente identificada por la Comisión Estatal de Seguridad, como “foco rojo” en cuanto a incidencia delictiva e inseguridad, pero en la práctica, no ven cambios sustanciales.
En esa secundaria, en ambos turnos hay al menos 850 estudiantes (con una plantilla de 90 profesores) que conviven con problemas como el consumo de alcohol en el interior del plantel, asaltos y robos, e incluso en la periferia ha habido agresiones a jovencitas, que no han sido atendidas de manera adecuada.
Reclamaron que los docentes y directivos no atienden las quejas, sólo les dicen que no quieren meterse en problemas y no atienden los llamados ni ponen orden en el interior de la secundaria.
Advirtieron que de continuar así, cerrarán la escuela en protesta “hasta que vengan maestros más valientes”.
Sobre la denuncia de una presunta violación a una estudiante en el centro educativo, dijeron que “sí es real, la mamá de la joven no está presente y no queremos afectarla, pero lo que se sabe es que fue dentro de la escuela y fueron cinco los que lo hicieron, y no queremos que vengan otros a hacer lo mismo con nuestras hijas, hubo una denuncia que está en la Procuraduría (Fiscalía General del Estado), pero no se ha resuelto nada”, expresaron al referir que las autoridades educativas no han dado información sobre este asunto.
Verónica Merino, representante del comité de padres de familia, confirmó que hay una denuncia por violación a una estudiante de la secundaria, pero dijo desconocer los detalles y reclamó que haya información y medidas inmediatas de seguridad para las y los alumnos.
Por su lado, el director de la secundaria, José Alfredo Mata Torres, dijo sentirse “sorprendido” por los reclamos de las madres de familia. Afirmó que sólo tenía conocimiento de que había molestia por falta de maestros debido a algunas jubilaciones.
En cuanto a la inseguridad, sostuvo que esos problemas “no son una particularidad de la escuela, estamos en un polígono rojo, así lo denominan las autoridades, y estamos en coordinación y hemos pedido el apoyo a las instancias competentes para que nos brinden seguridad en la entrada y salida”.
Cuestionado con respecto a la denuncia de una presunta violación ocurrida dentro del plantel, dijo que él se acababa de enterar con la manifestación de las inconformes, quienes dijeron que ese hecho había sucedido el pasado jueves, pero manifestó que no tuvo conocimiento, pues de lo contrario él habría dado aviso al Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos y a las instancias que les corresponde, pues se trataría de un delito y no se encuentra dentro de sus competencias el manejo de esos casos.
El director admitió que aún cuando hay un intendente en la puerta, las bardas perimetrales del plantel son muy bajas y personas ajenas se brincan para entrar al plantel. Reportó que la escuela en el turno vespertino carece de personal, incluso ya ha solicitado a sus superiores que se envíen dos vigilantes, dos prefectos y una persona de trabajo social. “Sobre seguridad externa, en el marco del programa de colaboración con las autoridades, el compromiso fue que nos enviarían patrullas para que hubiera vigilancia en los horarios de entrada y salida del plantel, lo estuvieron haciendo durante un tiempo, pero lo dejaron de hacer y hay días que no vienen. Desde el inicio de este año han venido 3 ó 4 veces y estamos conscientes de que tienen mucho trabajo, y estamos dispuestos a colaborar en lo posible”.