En la batalla participan alrededor de 100 personas, la mayoría habitantes de Tetelpa, de entre 15 a 40 años de edad, en dos bandos: los Insurgentes y los españoles, en el campo deportivo “Las Granjas”, en donde se puede apreciar el cerro de La Tortuga.
Los proyectiles que se avientan los bandos son paquetes de ceniza y algunos tamales de ceniza, pero también usan cañones pequeños con pólvora. Hay cuatro enfrentamientos y la representación termina cuando “El Pípila” va al Fuerte de los españoles y toma la fortaleza incendiando la puerta. Luego de este acto hay baile popular y chinelos.
En el pueblo indígena en donde prevalecen los usos y costumbres prolifera la venta de alcohol, pero también hay respeto, pues si una gente mayor te llama la atención, por lo general, todos respetan su edad y hacen caso a las indicaciones.