Señaló que actualmente están conociendo las necesidades del cliente para poder definir la forma en la que estarán trabajando con empresarios de China, a fin de que el producto logre ser comercializado en ese país.
Reconoció que esta actividad aún requiere de mayor impulso para que su producto llegue a los diferentes mercados, sin embargo, “estamos trabajando para lograr llegar al mercado internacional y poder exportar a China, aunque en otro momento ya hemos llegado a Suiza; hoy en día se tiene esta oportunidad y esperamos que se logre consolidar y así tener más oportunidades para comercializar nuestro producto”, dijo.
Cázales Quintero calificó esta actividad como un trabajo de resistencia, "tengo 16 años con este proyecto, desde el cultivo hasta la transformación del producto, que a pesar de ser a largo plazo se tiene resultados", acotó.
Agregó que la pasión por su proyecto le ha permitido tener paciencia, ya que ha sido complicada la comercialización por la falta de impulso para integrarlo al mercado.
Comentó que en Morelos existen alrededor de 200 productores activos, 20 aproximadamente en la zona sur-poniente, con mayor presencia en los municipios de Puente de Ixtla, Miacatlán y Tlaquiltenango.
"En mi caso, como productora de Tlaquiltenango, tenemos un proceso muy minucioso, desde que se cultiva la planta, su cocción a través de horno de temazcal, todo es un trabajo artesanal. Ha sido un trabajo duro y con resultados a largo plazo, pero se va avanzando poco a poco", dijo.
Indicó que entre las diferentes variedades producen el agrave angustifolia espadín, angustifolia haw y tequila naweber azul, las cuales varían de acuerdo a la calidad de la tierra.
La representante del Sistema Producto Agave de Tlaquiltenango destacó que esta actividad genera empleos en la entidad, desde los temporales, que son en la temporada de cosecha y producción, hasta los fijos, por lo que representa una importante actividad económica para las familias morelenses.
Finalmente refirió que dentro del proceso del agave se requiere de un promedio de 21 días una vez que se cultiva el producto, “sí es mucho trabajo y ha faltado impulso para incorporarlo al mercado tanto nacional como internacional, sin embargo, ya hay negociaciones con China, estamos esperando conocer las necesidades del cliente para poder preparar la producción; pero definitivamente necesitamos apoyo para comercializarlo, es un producto muy noble y de calidad que requiere de apoyo e impulso para lograr así mejorar la productividad y por ende las oportunidades de empleo”, apuntó.