José Alejandro Chávez Carmona, representante legal de Moisés Gilberto Romano de la Cruz, explicó que este hombre fue acusado por parte de la Procuraduría del delito de homicidio calificado en agravio de quien en vida fuera su esposa, Ernestina Tolentino Castro.

“Después de que el Ministerio Público consignó la averiguación sin haber hecho una investigación suficientemente fuerte como para acreditar la probable responsabilidad de mi defendido, la jueza de Primera Instancia Penal del Distrito de Jojutla lo dejó libre, pues no encontró elementos suficientes para acreditar que mi cliente hubiera sido probable responsable del delito de homicidio calificado”, precisó.

Refirió que en este caso se acusaba a Romano de la Cruz de haber causado la muerte a su esposa con un fuerte golpe en la cabeza el pasado 17 de agosto, por lo que fue encarcelado; sin embargo, el Ministerio Público no pudo acreditar la responsabilidad.

“Las pruebas que ofreció el Ministerio Público no eran lo suficientemente fuertes. Con el poco tiempo que tiene el Ministerio Público para investigar, considero que a veces sería mejor que en vez de causarle molestias de este tipo a una persona, pues mejor permitir las averiguaciones a la mesa investigadoras, integrarlas perfectamente, y entonces sí proceder en consecuencia. En este caso, desearon o decidieron consignarla de inmediato, vencidas sus 48 horas, y posteriormente el juez en los seis días del plazo constitucional ampliado lo dejó libre –el 25 de agosto de este año-, por lo que, digo, no hubo elementos para procesarlo”.

Destacó que por esta situación el hombre fue alejado de sus hijos, e hizo hincapié en que este caso se ventiló en los medios de comunicación, y así como se publicó que fue detenido por presunto homicida, debe ahora informarse que fue liberado. “Así como se informó que se había detenido y consignado como probable responsable del delito de homicidio calificado, también es justo que hoy se informe que Moisés Gilberto Romano de la Cruz hoy está gozando de su libertad, en virtud de que no hay ninguna prueba que lo incrimine como el autor material del delito de homicidio”.