Jojutla.- La Escuela Secundaria “Benito Juárez”, con 75 años de fundación, resultó dañada severamente en su estructura, por lo que tendrá que ser demolida. Los directivos y los padres de familia ya buscan un lugar alterno para la impartición de clases.
La directora del plantel, Graciela García Lara, dio a conocer ayer que el Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM) les notificó desde la semana pasada que la escuela está en riesgo total y tendrá que ser derribada.
“Nos comentan que se va a tener que demoler por completo, porque se dañaron las estructuras de los salones y están en riesgo de caer”, explicó.
Mencionó que la mayor parte de los edificios tienen daños, sólo el área administrativa y otros dos inmuebles no están tan graves, pero tendrán que ser examinados por especialistas. “Esperamos que todavía vengan del Ineiem (Instituto Estatal de Infraestructura Educativa de Morelos), que es quien verifica la situación de las escuelas”, apuntó.
Descartó que se vaya a perder el ciclo escolar y comentó que ya buscan espacios alternos donde dar clases.
“Estamos buscando un lugar donde reubicar la escuela, que sea accesible para los niños, porque vienen de muchas comunidades alejadas. Estamos buscando espacio cerca del colegio Reforma, pero estamos abiertos a que si alguna persona nos ofrece un espacio, se lo agradeceremos mucho”, afirmó.
Comentó que por el momento no se sabe si se podrá recuperar el mobiliario.
Aseveró que en la escuela hay mil 300 alumnos en los dos turnos y trabajan 96 personas, entre docentes y administrativos, muchos de los cuales también perdieron sus viviendas por el sismo.
Aprovechó este medio para convocar a una reunión de padres de familia el viernes 29 de septiembre, a las 10 horas, en la misma escuela.
Por su parte, los integrantes del comité de padres de familia también manifestaron su desazón por el dictamen y la necesidad de buscar un lugar donde dar clases.
Lo importante es privilegiar la seguridad de los niños, apuntó Óscar Uribe, vocal del comité de padres.
“Es la primera vez que nos reunimos y todavía no sabemos dónde se podrían dar clases. Ojalá que alguien nos pueda apoyar con un lugar que sea seguro”, añadió Nadia Karina, otra vocal.