Reconoce el regidor de esa comisión.

Jojutla.- El Sistema de Agua Potable (SAP) de este lugar tiene un déficit del 40 por ciento en el abasto del líquido en el centro de la ciudad, aunado a que la temporada de estiaje se ha prolongado, lo que dificulta satisfacer la demanda.

El regidor Arnoldo Heredia Romero precisó que desde hace tres semanas se esperaba que las lluvias fueran más constantes y se redujera el calor y el consumo de agua. Sin embargo, no ha sido así, y la población mantiene una demanda de más del 30 por ciento en relación con la temporada de lluvias.

Reconoció que el sistema de agua es deficitario. Entre las causas, mencionó el rezago, los déficits de las cargas, las obras de introducción de tuberías y los problemas que quedaron después del sismo del año pasado.

“Todo eso hace que tengamos un 30-40 por ciento de déficit en el servicio de agua potable en la red de Jojutla”.

Reseñó que antes del temblor del 19-S, había problemas de tuberías en mal estado y fugas, y después del sismo el problema se agudizó con averías en los pozos y el pago de energía eléctrica.

“Eso nos ha hecho tener una distribución deficitaria del agua en el primer circuito de la cabecera y los calores hacen que la situación sea complicada”.

Destacó que después del sismo, el sistema entró en una situación complicada, ya que además de los daños a las tuberías, la gente dejó de pagar el servicio, lo que los llevó a una deuda de dos millones de pesos con la Comisión Federal de Electricidad, por el pago de energía eléctrica, y aunque recurrieron incluso al Senado de la República para pedir la condonación del adeudo por la situación de desastre que vivía la ciudad, no fue concedida.

Para rematar, actualmente, alrededor del 50 por ciento de los usuarios no paga el servicio, por lo que llamó a la población a hacer conciencia y cubrir la cuota correspondiente.

Dijo que en lo que resta de la administración se dedicarán a revisar y apurar las obras hidráulicas que ofreció el gobierno del estado en la cabecera municipal, en donde se sustituyó el circuito principal; a reparar todas las fugas que existan y a insistir a la ciudadanía que pague y limitarán el servicio a los deudores morosos.

Admitió que el organismo trabaja con números rojos y consideró que así ha sido en las administraciones pasadas.