Desde hace 30 años, ha recogido basura en Jojutla para subsistir.
Jojutla.- Con casi 30 años de vivir de la pepena de basura, Jesús Ramírez Lazcano todavía alcanza a obtener un ingreso mínimo para vivir de los desechos.
“Casi siempre hay basura, casi siempre hay plástico. Ahora sí que hay veces que me ganan los compañeros, porque no nada más yo recojo, vienen varios. Lo que a mí no me gusta es que hay compañeros que llegan y rompen las bolsas, para mí eso no va, ni me gusta, porque hacen regadera de basura y no va”, dijo.
Mientras hurga en una montaña de basura de una unidad habitacional, Jesús, a quien apodan “El Colima”, dijo que se sigue generando la misma cantidad de basura que hace décadas. Ahora lo que más se busca es el PET, plástico y el cartón.
Comentó que actualmente obtiene entre 70 y 80 pesos diarios, cuando en su juventud llegó a obtener hasta 500 pesos.
“Ya no es igual. Mucha gente se fue de esta unidad habitacional, yo de aquí me llegué a sacar hasta tres viajes bien cargado, pero bien cargado”.
Aclaró que no busca en cualquier lado, pues ya tiene ubicados sus lugares de trabajo, incluso saca la basura de las casas y obtiene propinas.
Dijo que no tiene vergüenza de que lo llamen pepenador, porque la gente ya lo conoce y no es “ninguna pena” recoger basura.
Una vez iba a su casa con su hijo, a la colonia Altavista, y se subieron a una combi del servicio público. Entonces, los pasajeros se quejaron porque iban muy “apestosos” y el chofer de la unidad les devolvió su pasaje y tuvieron que bajarse. Afortunadamente, pasó por ahí un amigo y les dio un aventón.
Consideró que lo bonito de su trabajo es que le genera dinero y trabaja a su ritmo, no como en la presidencia municipal, donde laboró hace años y sin ganar lo suficiente.
Jesús aseguró que no tiene casa y cuando le agarra la noche, se queda a dormir con alguno de sus tres hijos, de acuerdo con el municipio en el que se encuentre.