Junto con trabajadores municipales, Mario Ocampo fue retenido en el palacio municipal para exigirle que firme la delimitación territorial y que no herede deuda al nuevo municipio.
Puente de Ixtla.- Con agresiones físicas y verbales, pobladores de Xoxocotla, encabezados por integrantes del Concejo Municipal Indígena de ese lugar, tomaron el palacio municipal de este lugar, donde retuvieron al alcalde, Mario Ocampo Ocampo, y a otros trabajadores para exigir la delimitación territorial y no heredar deuda de Puente de Ixtla al ahora municipio indígena.
De acuerdo con la versión de autoridades municipales, alrededor de las 11:40 horas del jueves, vecinos e integrantes del Concejo Municipal Indígena de Xoxocotla llegaron a la presidencia municipal.
De forma violenta, interceptaron el automóvil en el que el alcalde Mario Ocampo disponía a retirarse del lugar.
“El presidente se retiraba de la presidencia, iba a una reunión al Idefomm, pero la gente de Xoxocotla le impidió el paso; el presidente todavía se bajó para hablar con ellos, pero entre insultos, empujones y golpes, el edil fue resguardado por algunos trabajadores y llevado a la presidencia, donde más tarde impidieron que saliera”, relató una trabajadora de la administración municipal que pidió mantenerse en el anonimato.
De manera violenta y por la fuerza, el grupo de manifestantes procedió a tomar la presidencia municipal, sin dejar salir ni entrar a nadie durante aproximadamente tres horas. En el interior fueron retenidos el alcalde y varios trabajadores.
En el acto intervinieron elementos del Mando Coordinado, el Director de Protección Civil y del Ejército mexicano que se encontraban en el lugar.
Minutos más tarde se presentó Leonel Zeferino, presidente del Concejo Municipal Indígena de Xoxocotla, quien aceptó que la presencia de los manifestantes fue para exigir la firma de la delimitación del territorio para la separación con Puente de Ixtla y que no se herede deuda pública.
Sin embargo, tras el arribo de elementos policiacos, el grupo de inconformes se mantuvo en el sitio y no se retiró sino un par de horas después.
Más tarde, ante esta situación, arribó el comisionado estatal de Seguridad, José Antonio Ortiz Guarneros, quien se reunió con el presidente municipal a fin de establecer la coordinación para reforzar la seguridad en el municipio.
Señaló que su trabajo es conservar el Estado de derecho. “A eso venimos, a conservar el Estado de derecho. Se aumentará la seguridad en el municipio para que no se repita la situación”, comentó.
Agregó que el conflicto en cuestión de territorio se resolverá a través del gobierno del estado, por medio de la Secretaría de Gobierno. Mientras tanto, el municipio contará con el resguardo de la Policía Federal, la Guardia Nacional y el Mando Coordinado de la CES.
Ortiz Guarneros exhortó al edil a presentar las denuncias correspondientes por las personas que hayan resultado lesionadas, los daños causados e incluso la privación ilegal de la libertad de la que hayan sido objeto.