Y que se reconozca una segunda etapa de 462 lotes
Jojutla.- Ante la animadversión de los vecinos que no quieren que se construyan más casas en la unidad habitacional Morelos, el sindicato nacional azucarero, creador del fraccionamiento, quiere entregar ya el conjunto al municipio.
El secretario general de la Sección 72 del sindicato nacional azucarero, José Barrera Sánchez, reconoció que a lo largo de los años, el tema de la unidad Morelos “se ha complicado”.
“Ha habido malas informaciones, en su momento malas administraciones, pero hoy día, la parte legal la tiene el sindicato local, a través del sindicato nacional, que es el dueño, pues el fideicomiso (Ficcoia, Fideicomiso para la Construcción de Casas para los Obreros de la Industria Azucarera) subsiste. Nosotros somos los dueños, el sindicato nacional, a través del Banco del Bajío, que es el dueño del fideicomiso, no puede prescribir hasta que no se establezca lo que viene escrito dentro del fideicomiso, que es la regularización hasta de la última casa”.
Aseguró que recientemente tuvieron un acercamiento con el alcalde de Jojutla, Juan Ángel Flores Bustamante, porque ya quieren entregar el conjunto de más de mil viviendas al municipio, y terminar con los conflictos.
Señaló que en este primer encuentro les solicitaron acreditar la titularidad de los predios, situación que incluso ya cumplieron y esperarán una nueva cita.
Resaltó que la idea en la unidad Morelos es que existen dos etapas, la primera, de alrededor de 1,050 viviendas, y una segunda, de 462.
“Aclaramos a la gente de la unidad, que el sindicato no quiere crear más terrenos, ni quitarlos, ni ponerlos. Únicamente queremos regularizar las dos etapas pendientes. Todos los terrenos están dados, las dos etapas, en su momento, ya se estructuraron. Hoy día, lo que pretende la Sección 72, es que conforme a ley, se le de la facultad a cada titular, que tienen título de posesión”.
Aseguró que en los terrenos donde se está construyendo - y que están generando el rechazo de los vecinos- están avalados por el sindicato.
“Son 462 lotes adicionales a la primera etapa, que están repartidos en la unidad, que no afectan a la primera etapa. No se tocan las áreas verdes, son áreas que se asignaron de otra parte”.
Resaltó que lo que sí es un problema en este momento, es que los propietarios se adjudicaron más superficie de la que les correspondía, apropiándose de andadores, drenajes, redes de agua potable, etc, por lo que en las pláticas con el municipio, se están también buscando estrategias para que eso entre al proyecto de regularización y se hagan los cambios pertinentes.
No obstante, reconoció que la unidad fue construida para los obreros, pero la gran mayoría vendió sus casas.